El incendio en la planta nuclear puso de manifiesto los peligros de los combates en las inmediaciones de una central nuclear.
Las tropas rusas se apoderaron de la mayor central nuclear de Europa tras un ataque en plena noche que la incendió brevemente, suscitando el temor mundial a una catástrofe.
Funcionarios de Naciones Unidas y locales confirmaron luego que no se liberó radiación, pero se trató del giro más escalofriante de la invasión de Moscú a Ucrania hasta el momento.
Los bomberos ucranianos apagaron el incendio provocado por los cañoneos rusos, mientras Rusia siguió adelante con su campaña desde varios frentes para tratar de paralizar el país.
El número de refugiados que huían del país superó los 1.2 millones.
Mientras una enorme columna de vehículos blindados rusos parecía estancada en las afueras de Kiev, amenazando con tomar la capital, el ejército del presidente ruso Vladimir Putin ha lanzado cientos de misiles y ataques de artillería contra ciudades y otros lugares del país, logrando avances significativos en el sur, en un aparente intento de reducir el acceso de Ucrania al mar.
El director de la Agencia Internacional de la Energía Atómica, el argentino Rafael Mariano Grossi, dijo que un “proyectil” ruso hizo impacto en un centro de formación de la planta de Zaporizhzhia, en la ciudad suroriental de Enerhodar, sin afectar alguno de sus seis reactores.
El incendio en la planta nuclear puso de manifiesto los peligros de los combates en las inmediaciones de una central nuclear.
Es la segunda vez desde el inicio de la guerra que se plantean preocupaciones por un posible accidente nuclear o por la liberación de radiación, tras una batalla en Chernóbil.
El ataque causó preocupación en todo el mundo, pues evocó el recuerdo del peor desastre nuclear de la historia, ocurrido en la central ucraniana de Chernóbil.
En un emotivo discurso a la mitad de la noche, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski dijo que temía una explosión que fuera “el final para todos, el fin de Europa, la evacuación de Europa”.
Sin embargo, funcionarios nucleares de varios países, entre ellos Suecia y China, confirmaron que no se reportaron picos de radiación, como sostuvo Grossi.
Según funcionarios ucranianos, las tropas rusas tomaron el control de complejo, pero el personal de la central continúa garantizando su funcionamiento.
Solo un reactor estaba en funcionamiento, dijo Grossi después del ataque.
Dos personas resultaron heridas en el incendio, precisó Grossi.
El operador nuclear estatal ucraniano, Enerhoatom, dijo que tres soldados ucranianos fallecieron y que otros dos resultaron heridos en el ataque.
La crisis en Zaporizhzhia se desarrolló después de que Grossi expresara a principios de semana su fuerte preocupación de que los combates pudieran causar daños accidentales a los 15 reactores nucleares que Ucrania tiene en cuatro plantas en todo el país.
A raíz del ataque, Zelenski apeló nuevamente a Occidente para que imponga una zona de exclusión aérea sobre su país.