Las medidas llegan a los espacios privados, donde sólo se pueden juntar ahora un máximo de dos familias.
Hong Kong.- Las autoridades hongkonesas no descartan un confinamiento masivo en la ciudad para atajar la actual oleada de COVID, la cual ha provocado que cientos de residentes se planteen dejar la ciudad ante la severidad de las medidas tomadas.
"Las cosas se están poniendo cada vez peor y yo me voy de aquí, estoy triste, pero al mismo tiempo feliz de dar el paso", comenta la trabajadora bancaria Katie Cheung horas antes de embarcar rumbo a Melbourne junto a su hija de diez años.
Cheung, como muchos otros hongkoneses, ve con estupor cómo muchas tiendas están cerradas o que las estanterías de los supermercados estén cada vez más vacías ante las frenéticas compras de los últimos días para hacer acopio ante un hipotético confinamiento. "Llevo desde hace meses pensando en marcharme a Australia, es duro, mi marido tiene que quedarse en Hong Kong porque trabaja aquí, si me voy, tendríamos que estar separados durante años hasta que obtenga pasaporte australiano, pero estoy decidida, creo que mis hijos tendrán un futuro mejor en otro sitio", asegura Cheung, de 42 años.
Al igual que ella, otros residentes están abandonando la ciudad o piensan en hacerlo en medio de un recrudecimiento de las medidas antiCOVID para combatir el último rebrote de la variante ómicron, que solo hoy dejó 32,597 nuevos casos.
Las medidas llegan a los espacios privados, donde sólo se pueden juntar ahora un máximo de dos familias, además de pruebas obligatorias de ácido nucleico o la imposición de un pasaporte de vacunación.
Desde que comenzó la pandemia, la ciudad ha registrado 238,000 positivos, más del doble que los 109,000 contabilizados oficialmente en la China continental.