En el zoológico de Taskent, capital de Uzbekistán, una mujer arrojó a una niña al recinto de un oso pardo. Varias personas, entre ellas miembros del personal, intentaron impedirlo, pero la mujer consiguió tirar a la niña por encima de la valla metálica de protección y la menor terminó cerca del animal, de nombre Zuzu.
Por fortuna, el oso solo se acercó a ella, la olfateó y se alejó. "Los trabajadores de la sección de depredadores reaccionaron rápidamente y comenzaron a atraerlo [a Zuzu] hacia una sección interior, donde no tardó en entrar", informó el zoológico. La niña fue rescatada y posteriormente examinada por una enfermera. La pequeña sufrió algunos moretones, resultado de la caída desde una altura de 5 metros, pero, aparte de las contusiones, "no se encontraron lesiones graves visibles". Medios locales, citando a la Procuraduría, aseguran que la mujer, que fue detenida, era la madre de la niña, de 3 años. Se presentó una causa penal por intento de asesinato, subrayaron.