Redondo fue propuesto como candidato para presidir el Parlamento, como parte de un acuerdo, solo para el nivel electivo presidencial.
Tegucigalpa,- El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, se despidió este martes del Parlamento, que no reconoce la nueva presidenta del país, Xiomara Castro, diciendo en su último informe que hizo justicia social.
"Hemos atendido con Vida Mejor y los diferentes programas sociales a la gente más necesitada, hemos hecho justicia social y les invito a seguirlo haciendo porque hay mucho por hacer todavía", indicó Hernández en su informe de modo virtual.
El gobernante envió su mensaje al Parlamento que desde hoy preside Jorge Cálix, disidente del Partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda), bajo cuya bandera Castro ganó la presidencia con una abrumadora mayoría en las elecciones de noviembre pasado.
El otro Parlamento que se instaló hoy lo preside Luis Redondo, del Partido Salvador de Honduras (PSH), quien no tuvo el apoyo de una veintena de los 50 diputados que obtuvo Libre en las elecciones.
Redondo fue propuesto como candidato para presidir el Parlamento, como parte de un acuerdo, solo para el nivel electivo presidencial, entre Castro, Libre, el PSH y otro partido minoritario.
El mandatario hondureño se dirigió a los diputados del legislativo que preside Cálix, de los que 44, de los 128 que conforman el Parlamento son del gobernante Partido Nacional, felicitándoles "por haber sido electas y electos en este pasado proceso electoral".
Añadió que los comicios celebrados el 28 de noviembre de 2021 fueron "elecciones donde se utilizó tecnología, pero donde el fervor patrio se sintió".
"Así se ha fortalecido nuestra democracia, me siento orgulloso del acompañamiento de la comunidad internacional, pero también del acompañamiento de nuestro Gobierno, proveyendo los recursos financieros y logísticos para poder tener estas elecciones", subrayó.
Hernández también señaló que su administración está dejando "una macroeconomía sólida, con el respaldo de las firmas como lo son las calificadoras de riesgo (Moody's y Standard & Poor's), el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero que se traduce al final en acceso al crédito y condiciones especiales para el pueblo hondureño".
"Me siento orgulloso de que recibimos el país más violento del mundo y ahora no lo somos; hay retos en seguridad, tenemos que seguir trabajando en seguridad, pero hemos avanzado de manera muy importante", agregó.
En materia de infraestructura, indicó que deja "un sistema logístico especial" al "unir el océano Atlántico con el Pacífico", a través del denominado corredor seco, una autopista de unos 300 kilómetros de cuatro carriles.
También se refirió al apoyo que le brindó su gobierno a otros sectores productivos y programas en materia de salud, entre otros.
Hernández finalizará el jueves su segundo período en el gobierno, el último salpicado por múltiples denuncias de presuntos actos de corrupción y narcotráfico, algunas desde Estados Unidos, las que siempre ha rechazado.
Su segundo mandato, además, lo logró violentando la Constitución, que no permite la reelección bajo ninguna modalidad, pero una interpretación del poder judicial le dio vía libre para que lo hiciera.
Las principales fuerzas de oposición lo acusan además de haber ganado las elecciones de noviembre de 2017 mediante un "fraude".