Aún se desconoce la situación de otros 18 trabajadores atrapados en el interior. Dos personas fueron rescatadas horas antes.
La mañana de ayer, el estallido dejó a 33 trabajadores atrapados bajo tierra.
Estos accidentes suelen deberse a una llama o chispa eléctrica que prende el gas que emana la veta de carbón, aunque, en esencia, los sistemas de ventilación deben impedir que el gas quede atrapado.
Los socorristas intentan localizar a sobrevivientes dentro de la mina, ubicada en Jinshangou, en la región de Chongqing.
La oficina de inspección de seguridad en las minas en el municipio de Chongqing informó de las muertes, según la agencia noticiosa estatal Xinhua.
La industria minera china está desde hace tiempo entre las más mortales del mundo, aunque en los últimos años se ha reducido el número de víctimas con mejoras de seguridad y el cierre de minas más pequeñas y peligrosas.