Los consumidores mexicanos ya comienzan a ajustar sus carteras. Entre las alzas de precios y el panorama económico que está sujeto a la evolución del COVID-19, de nuevo hay algunas categorías que no son consideradas como primordiales a la hora de llenar el carrito.
Como ocurrió al inicio de la pandemia, en 2020, los mexicanos piensan reducir en 40% su gasto en electrónicos y tecnología, 39% en productos de belleza, 34% en ropa y calzado y 17% en la categoría de alimentos y bebidas, según datos de el análisis Propósitos de consumo para 2022, realizado por la consultora Psyma. Los compradores piensan aumentar sus presupuestos en categorías en 32%.