Las autoridades rusas prevén endurecer sus leyes sobre pedofilia este mes para encarcelar automáticamente a estos criminales de por vida en duras prisiones en Siberia. La legislación está siendo aprobada después del caso de la niña Veronika Nikolayeva, de cinco años, quien fue secuestrada y asesinada por un pedófilo reincidente y su amante. El presidente del Parlamento, Vyacheslav Volodin, un aliado cercano del mandatario Vladimir Putin, dijo que la "terrible tragedia" del abuso y la muerte de Veronika.