Se pudieron observar camiones llenos de gente de diversas partes de la república.
Por segundo día consecutivo, la carretera 57 a la altura del kilómetro 53 de Allende se saturó y la vialidad se tornó lenta debido al retorno de paisanos a Estados Unidos y de personas originarias del sur que viven y trabajan en Piedras Negras o Acuña tras las fiestas navideñas.
En el puesto militar frente a la ex-garita del kilómetro 53 se pudieron observar cientos de autobuses de pasajeros que traían personas de diversos estados de la República, mismos que eran revisados minuciosamente para evitar el tráfico de personas indocumentadas.
Las largas filas también incluían automóviles con placas de los Estados Unidos, camiones de carga y de personas originarias de la región que también fueron a vacacionar al interior del país.