Julio Borba, recordó que esta variante "es mucho más contagiosa" y que el bajo nivel de vacunación en la población "preocupa" a las autoridades.
Asunción.- Paraguay registró este lunes 226 nuevos casos de la COVID-19 en una jornada en la que fallecieron seis personas, según el informe diario del Ministerio de Salud del país suramericano.
De las 2.861 muestras analizadas, 226 dieron positivo, por lo que el país alcanzó los 465,564 casos acumulados desde que el 7 de marzo de 2020 se registrara el primer positivo de COVID-19, mientras que la cifra de fallecidos aumentó a 16,607.
Respecto a los fallecimientos, se trató 2 personas de la franja entre 40 y 59 años y otras 4 de más de 60 años, 3 no estaban vacunadas y 3 tenían la dosis completa.
Paraguay afronta su "tercera ola" de COVID-19 tras el aumento consecutivo de casos en varios departamentos (provincias) durante las últimas semanas.
Este lunes, las autoridades sanitarias del país suramericano confirmaron los tres primeros casos de la variante ómicron del coronavirus SARS-Cov-2.
La doctora Sandra Irala, directoria de Vigilancia de la Salud, comunicó, en su comparecencia ante la prensa, que las muestras analizadas corresponden a "casos importados relacionados a viajeros que retornaron al país en fechas próximas".
Los tres positivos corresponden a "jóvenes con promedio de 18 años" que proceden de Cancún (México), en palabras de Irala, quien confirmó que cuentan con el esquema completo de vacunación.
Además, indicó que hay otras 46 muestras "sospechosas" que están siendo analizadas.
La experta mostró su "preocupación" por la posible coexistencia en Paraguay de las variantes delta que actualmente predomina en el país suramericano y la ómicron que acaba de ser detectada.
Por su parte, el ministro paraguayo de Salud, Julio Borba, recordó que esta variante "es mucho más contagiosa" y que el bajo nivel de vacunación en la población "preocupa" a las autoridades.
"No hay que escatimar esfuerzos ante esta situación. La solución es la vacunación", indicó Borba, quien comentó que "a mayor cantidad de contagiados, habrá mayor cantidad de enfermos y, por tanto, de pacientes que podrían requerir internación".