La inseguridad y las presiones de orden familiar y social inciden en la decisión de abortar.
Mujeres ponen en riesgo su vida con el aborto, al tratarse de adolescentes es mayor el peligro, se compromete la salud reproductiva tanto desde el punto de vista biológico, psicológico y social.
La tasa anual de abortos inducidos en México es de 33 abortos por cada 1,000 mujeres de 15–44 años. El hospital Amparo Pape de Benavides atiende hasta 13 menores embarazadas al mes y en reciente fecha se presentaron 12 solicitudes de abortos.
La interrupción del embarazo puede provocar hemorragias e infecciones severas, enfermedad inflamatoria pélvica, infertilidad e incluso la muerte. Afectaciones psicológicas como baja autoestima, ansiedad, irritabilidad y depresión. Las principales razones por las que una adolescente optan por el aborto, es que tener un hijo dificultaría su educación o su trabajo, además de no sentirse preparadas para ser madres en ese momento.
Atención. Respecto al tema, el director del Hospital Amparo Pape de Benavides, Ángel Cruz García, señaló que de entrada el embarazo en menores de edad es un riesgo latente, e influye en el desarrollo del feto y en muchos casos llegan a presentar complicaciones serias durante el embarazo o el parto.
Esto es debido a que su cuerpo no se encuentra preparado para concebir. Desafortunadamente la cifra de embarazos en adolescentes sigue en aumento. "En el hospital se atienden de 10 a 13 menores en gestación". En cuanto a la práctica de abortos, señaló que "ya se han recibido alrededor de 12 solicitudes, en su mayoría son mujeres menores de 17 años".
Disposición. Reconoció que en el hospital se cuenta con un módulo de orientación, para que las mujeres tomen la decisión de abortar o continuar con el embarazo.
"Estamos hablando de un tema muy delicado y tenemos que darle seguimiento oportuno a cada caso, desde que anunciamos que estamos realizando abortos, se han presentado más solicitudes".
Autorización. El pasado mes de septiembre, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, aprobó la despenalización del aborto en Coahuila. Con ello el artículo 196 del Código Penal del Estado en el que establece tres años de prisión a quien se realice y asista en dicha práctica, incluso si se trata de un caso de violación, quedó invalidado.