La temporada de botas no cesa, directores creativos las han escalonado como el calzado insignia que no conoce de estacionalidad.
Dominan el orbe de la versatilidad y resultan ser la alternativa ideal para orquestar estilismos que no cuentan con márgenes de error. Ya hemos hablado de la era Y2K, así que es momento de dar paso al retorno de la época de los 90, que va un paso más allá de lo conocido. Balenciaga, en su creación Pre-Fall 2022, abrazó el minimalismo de los noventa, expuso el negro como una coloración llena de actitud, y dispuso como absolutas las botas slouchy.