Lewis Hamilton saldrá segundo, en la primera fila detrás del neerlandés Max Verstappen.
El siete veces campeón del mundo inglés Lewis Hamilton (Mercedes), que saldrá segundo, justo detrás -en la primera fila- del neerlandés Max Verstappen (Red Bull) este domingo en el Gran Premio de Abu Dabi, el último del año, que decidirá el Mundial de Fórmula Uno entre ellos -igualados a puntos (369,5) pero con una victoria más para el piloto de los Países Bajos-, declaró tras la calificación de Yas Marina que saldrán "con neumáticos distintos (él con el medio y su oponente con el blando)" y que "a ver qué pasa".
"Felicito a Max, ha dado una vuelta sensacional", manifestó Hamilton, de 36 años -doce más que su gran rival-, que apunta este domingo a un inédito octavo título mundial, que desharía a su favor el empate que le une al alemán Michael Schumacher.
"Ha hecho un gran trabajo y no pudimos seguirle el ritmo, simplemente", comentó el espectacular y excéntrico campeón de Stevenage, que se quedó a más de tres décimas de su rival en la cronometrada principal para el último Gran Premio del Mundial más emocionante de los últimos años.
"Él ya tenía muy buena pinta en el último entrenamiento libre", apuntó Hamilton, que hace una semana, en Yeda (Arabia Saudí) elevó a 103 sus propios récords históricos de 'poles' y de victorias en la categoría reina del motor.
"En parrilla tomaremos la salida con neumáticos de compuestos distintos, así que habrá que ver qué pasa", comentó en el circuito de la capital de los Emiratos Árabes Unidos el capitán de Mercedes, que fue abucheado, durante su entrevista a pie de pista, por parte del público presente en Yas Marina, donde este domingo se esperan, al menos, unos diez mil seguidores neerlandeses llegados de su país para apoyar, obviamente, a Verstappen.
"La verdad es que no entiendo por qué esta gente está haciendo este ruido", comentó Hamilton, que, al ser preguntado más tarde, negó sentir la misma presión que en 2016, cuando se le escapó el título a favor de su entonces compañero alemán Nico Rosberg.
"Es difícil comparar, son escenarios completamente diferentes; en lo que a la suerte se refiere, también. Ahora me siento mucho mejor; y además soy mejor piloto que en 2016", explicó el astro británico, que apunta asimismo a conseguir con su escudería el octavo título seguido en el Mundial de constructores, que Mercedes lidera con 28 puntos de ventaja sobre Red Bull.