"California puede y debe ir más allá y hacer más para garantizar que cualquier persona que busque servicios de aborto los pueda obtener".
Defensores del aborto en California presentaron este miércoles un plan para hacer del estado un santuario de libertad reproductiva y que esté listo para atender a cualquier persona que busque esos servicios en Estados Unidos.
La propuesta del Consejo del Futuro del Aborto de California se da justo cuando el Tribunal Supremo de Estados Unidos evalúa una ley aprobada en 2018 en el estado de Misisipi que restringe el aborto, que pone en la balanza la decisión "Roe contra Wade" en 1973 que legalizó el aborto en el país.
El Consejo del Futuro del Aborto de California, conformado en septiembre pasado por más de 40 proveedores de servicios de aborto y grupos de defensa, publicó hoy una lista de 45 recomendaciones para que el estado las considere si el Tribunal Supremo anula "Roe contra Wade".
El Consejo cuenta con el apoyo del gobernador de California, el demócrata Gavin Newsom, y la Legislatura estatal, que libran un nuevo pulso contra las políticas conservadoras en el país.
"Cuando dirigí los servicios clínicos para un centro de salud para mujeres, vi a innumerables personas que necesitaban información, servicios y apoyo", dijo en un comunicado la presidenta del Senado de California, Toni Atkins.
Destacó que tanto la Legislatura como el Consejo se quieren asegurar "de que los californianos y las personas de todos los estados puedan obtener los servicios de salud reproductiva que necesitan de manera segura y oportuna, y que todos los derechos permanezcan consagrados en la ley".
Entre las recomendaciones hechas en el plan del Consejo destacan el refuerzo al acceso al aborto, la educación sobre el tema y las leyes relevantes, y la privacidad en torno al procedimiento.
Desde que el Supremo legalizó el aborto esa práctica se ha permitido en Estados Unidos hasta el momento de "viabilidad" del feto fuera del vientre materno, un límite que ahora está en torno a las 23 o 24 semanas de embarazo.
Pero la nueva ley estatal de Misisipi establece un límite que prohibiría a la mayoría de las mujeres acceder a un aborto a partir de las 15 semanas de embarazo.
El Supremo escuchó a las partes el pasado 1 de diciembre, y se espera que emita una decisión el próximo año.
Amy Moy, de la organización Essential Health Access, advirtió en el comunicado que "como la mayoría de los jueces del Tribunal Supremo parecen estar dispuestos a socavar la autonomía corporal de millones y permitir que se mantengan las restricciones extremas al aborto, California puede y debe ir más allá y hacer más para garantizar que cualquier persona que busque servicios de aborto los pueda obtener".