Carolina Espinosa Caballero y su pareja, Fausto Hermida Veites, volvían a casa a bordo de sus bicicletas durante la madrugada del 1 de agosto de 2020.
Fue en el cruce de avenida Patriotismo y Puente La Morena, en la Ciudad de México, donde fueron arrollados por el conductor de un automóvil que manejaba a exceso de velocidad. Este hombre de origen oaxaqueño es ahora buscado por las autoridades.
José Manuel Díaz-Simón Padilla —parte del equipo de asesores legales de la familia de Carolina— comenta en entrevista con EL UNIVERSAL que los hechos sucedieron alrededor de las 2:00 de la mañana, cuando la pareja viajaba rumbo a su casa.
Cuando llegaron a ese cruce, un vehículo impactó contra la pareja, puesto que iba "jugando carreritas" con otro conductor; ambos automovilistas viajaban en estado de ebriedad.
En un primer momento, la pareja de ciclistas logró incorporarse; sin embargo, el otro conductor impactó con su vehículo a Carolina, quien se reincorporó en dos ocasiones, pero el conductor aceleró hasta arrebatarle la vida.
Tras los impactos, el cuerpo de Cariñx, como le decían sus amigas, quedó bajo uno de los vehículos. Personal de una gasolinería cercana auxilió a Fausto Hermida para sacar el cuerpo de la joven y logró quitarle las llaves al presunto asesino identificado como Miguel Ángel Cisneros Aquino de 28 años.
Cisneros Aquino logró darse a la fuga para eludir su presunta responsabilidad del delito de homicidio culposo.
Sin embargo, dadas las circunstancias en las que sucedieron los hechos, el delito fue reclasificado por las autoridades como homicidio doloso.
Los videos de la gasolinería, así como de los establecimientos cercanos, sirvieron para corroborar lo sucedido y fincar la presunta responsabilidad de este hombre, quien es de origen oaxaqueño.
En noticieros y redes sociales, la madre de Carolina ha reunido la fuerza para dar testimonio de los hechos y exigir justicia para su hija, así como para las demás víctimas de accidentes viales; además, su familia pide ayuda para localizar a Cisneros Aquino y que sea procesado por la justicia.
La organización oaxaqueña Gaby Bici Blanca, surgida tras la muerte de la ciclista Gabriela Soto en la ciudad de Oaxaca, señala que en México mueren 44 personas al día por accidentes viales; mientras que desde el 18 de junio a la fecha hubo mil 188 muertes relacionadas con la falta de seguridad vial.
Hasta el momento no hay indicios sobre el paradero del responsable de la muerte de Cariñx; no obstante, las autoridades lograron establecer que es originario de Oaxaca, en donde —se presume— permanece escondido, pues la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México emitió una ficha de búsqueda y localización por su presunta responsabilidad en el delito de homicidio.
Desde el accidente, el responsable desapareció incluso de las redes sociales.
Al respecto, el asesor legal señala que hay un equipo de inteligencia que, en colaboración con la familia de Carolina, busca a Cisneros Aquino.
El duelo por la partida de Carolina no solamente afectó a su familia, sino a la comunidad ciclista, músicos y amigos, quienes desde hace más de un año organizan rodadas, manifestaciones, movilizaciones, actividades culturales y posteos masivos con el rostro del hombre que le arrebató la vida.
Cariñx es recordada con indignación, pero también con profundo afecto por quienes la conocieron, señala el asesor. Esta joven era historiadora, ciclista, música, daba clases a personas para ayudarles a terminar sus estudios y colaboraba con quienes le pedían ayuda. Tras el accidente, una bicicleta blanca fue colgada en ese cruce vehicular.
La partida de Cariñx, señala el asesor legal, ha servido para visibilizar las condiciones precarias en las que se encuentran los derechos de las y los ciclistas en la Ciudad de México.
Mientras los conductores de bicicleta levantan la voz para exigir justicia por Carolina, sus derechos se hacen visibles, se han creado ciclovías y mejoras viales tras los movimientos que encabezan quienes la recuerdan.