Fiscalía de Estados Unidos la acusa de tres delitos, todos ellos relacionados con el narcotráfico.
La Fiscalía de Estados Unidos pide 48 meses de prisión, es decir cuatro años, para Emma Coronel, la esposa de Joaquín Guzmán Loera, "El Chapo", por tres tres delitos relacionados al tráfico internacional de narcóticos.
A la esposa del Chapo, quien cumple sentencia de cadena perpetua en una prisión de Colorado, se le acusa de conspirar, desde 2011 y hasta el 19 de enero de 2017, en el tráfico de drogas, “con conocimiento de causa y de manera intencional”.
También se le acusa de colaborar en el tráfico de más de 450 kilogramos de cocaína, 90 kilogramos de heroína, 45 kilogramos de metanfetaminas y 90 toneladas de marihuana. “Tras el arresto de su marido en México en 2014”, continuó Nardozzi, “la acusada sirvió como mensajera con los miembros del cártel de Guzmán en el fomento de la actividad narcotraficante y de lavado de dinero”, explicó en su momento el fiscal del caso, Anthony Nardozzi (uno de los que también lideró el caso contra el Chapo).
Finalmente, se le acusa de llevar a cabo, “a sabiendas”, operaciones de lavado de dinero de beneficios provenientes del narcotráfico, así como de “involucrarse en transacciones y acuerdos propiedad” de Guzmán Loera, identificado como un “importante traficante de narcóticos”, evadiendo y omitiendo la prohibición de ese tipo impuesta por el gobierno de los Estados Unidos.
Coronel se declaró culpable de todos los cargos en una audiencia en julio pasado ante la corte del Distrito de Columbia, en la ciudad de Washington.
Coronel Aispuro se entregó en febrero a las autoridades estadounidenses y fue detenida con base en una queja criminal que mencionaba una acusación de conspiración para la importación de drogas y “ayudar e incentivar” las actividades criminales del Cártel de Sinaloa, liderado por su marido.
La solicitud ocurre al tiempo en que los presidentes Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden participan en una cumbre trilateral con Justin Trudeau, primer ministro de Canadá.