En cinco días la caravana de migrantes recorrió caminando alrededor de 60 kilómetros del territorio oaxaqueño, una cuarta parte de los 280 kilómetros que contempla la ruta que deben de seguir para llegar a la población de Sayula de Alemán, Veracruz.
Ahora son alrededor de mil 500 personas originarias de Centroamérica, Caribe y Sudamérica las que conforman la caravana; el grupo ha disminuido porque más de 800 personas desertaron de la caravana acogiéndose a las tarjetas humanitarias entregadas por el Instituto Nacional de Migración (INM).
Las personas que continúan su marcha partieron esta mañana de Santo Domingo Zanatepec con dirección al Río Ostuta, donde finalmente llegaron, descansaron y se refrescaron a la orilla del afluente que baja de Los Chimalapas y que tiene un nivel muy bajo en esta temporada.
Más tarde tienen contemplado continuar con el periplo hacia la población de Niltepec, recorriendo 21 kilómetros de distancia. Realizarán la caminata por la tarde noche para evitar las altas temperaturas que están por arriba de los 35 grados.
De esta manera, llegarán a su séptima parada desde que ingresaron en el estado de Oaxaca.
En estos cinco días que han estado en territorio oaxaqueño, han descansado en las poblaciones de Los Corazones, Chahuites, San Pedro Tapanatepec, El Jícaro, Santo Domingo Zanatepec y Río Ostuta, aún les queda por avanzar las poblaciones de Niltepec, La Venta, La Ventosa y Matías Romero.
Mientras descansan en el Río Ostuta, algunos migrantes piden dinero a los automovilistas que circulan en la carretera Panamericana.
Pequeños grupos se atreven a avanzar sin el contingente, arriesgándose a ser detenidos por el INM.