"No nos podemos quedar de brazos cruzados ante la farsa electoral".
César Lacayo, dirigente de la Fundación Unidos por Nicaragua, llamó este lunes a elevar la "presión a todos los niveles" sobre la "dictadura" de Daniel Ortega, incluyendo la expulsión del país del Tratado de Libre Comercio CAFTA-DR.
"No nos podemos quedar de brazos cruzados" ante la "farsa electoral" en la que el pueblo nicaragüense, con "dignidad", se abstuvo masivamente de participar este domingo, dijo a Efe.
Dos veces exiliado en EE.UU., la primera por la dictadura de Anastasio Somoza y la segunda por "la sandinista", Lacayo subrayó que no basta con que el mundo no de legitimidad a las elecciones en las que Ortega obtuvo su cuarta reelección consecutiva.
La comunidad internacional debe actuar de manera pro activa para ayudar a que la democracia se restablezca en Nicaragua.
Además de pedir que la Organización de Estados Americanos (OEA) aplique la Carta Democrática a Nicaragua, pidió que Estados Unidos, República Dominicana y los otros países centroamericanos lo expulsen del tratado CAFTA-DR por el mismo motivo.
En Nicaragua hay 150 presos políticos, entre ellos siete candidatos opositores a los que Ortega no dejó participar en las elecciones de ayer, unos 400.000 ciudadanos se han ido al exilio y el régimen "torturó y asesinó" cuando en 2018 los nicaragüenses salieron a las calles para pedir libertad, agregó.
Lacayo instó también al presidente de EE.UU., Joe Biden, a firmar la ley Renacer, ya aprobada por el Congreso y promovida por la congresista republicana María Elvira Salazar, quien es la exesposa de Arturo Cruz, uno de los opositores presos que quiso competir con Ortega en las urnas.
Según Lacayo, esa ley es mucho más estricta que una aprobada durante la Presidencia de Donald Trump, que nunca fue puesta en marcha y establecía sanciones para aquellos individuos y empresas con sede en EE.UU. que comerciasen o hicieran negocios con el régimen de Ortega y sus allegados.
La ley Renacer impedirá que, como ha ocurrido recientemente, organismos internacionales de crédito aporten préstamos a Nicaragua y sus efectos se van a sentir no inmediatamente, sino en un plazo de un año o menos, dijo Lacayo.
Esos créditos equivalen a "asesinar al pueblo de Nicaragua", dijo el dirigente de Unidos por Nicaragua, una organización sin afiliación política que ayuda a perseguidos de la "dictadura" de Ortega,
La Fundación convocó este domingo una manifestación en el parque Rubén Darío de Miami para que los nicaragüenses pudieran expresar su repudio al "circo electoral" de Ortega.
Lacayo salvó de las elecciones del domingo el que la mayoría de los nicaragüenses se quedaran en sus casas, como demuestra que los votos por Ortega, que solo competía con candidatos de cinco partidos "satelitales" del sandinismo, sean "menos del 20 % del padrón electoral".
Los que votaron, además de los orteguistas, fueron policías, militares y funcionarios, que estaban "obligados" a hacerlo, subrayó.