Encajó un parcial 3-15 en los últimos cuatro minutos de ese tercer cuarto que sentenció el choque.
Santiago de Compostela,- Con un parcial 3-15 en los últimos cuatro minutos del tercer cuarto, coincidiendo con la ausencia de Birutis en pista, el Barça acabó con la resistencia del Monbus Obradoiro (65-79) para mantenerse invicto en la Liga Endesa.
El desacierto del Obradoiro desde la línea de tres puntos allanó el camino al Barça, que dominó el marcador en el primer cuarto con cómodas ventajas (4-13, 8-19, 10-23). Todo lo que fallaba el equipo santiagués, lo metía su rival (4/6 en triples).
Moncho Fernández, que había pedido tiempo muerto a los dos minutos, estaba desesperado porque las pérdidas de balón y, sobre todo, el paupérrimo 0/6 en triples impedía a los suyos acercarse, pese a que Ellenson y Birutic hacían daño a la defensa azulgrana.
Sin acierto exterior -Ellenson encestó el primer triple al séptimo intento de su equipo-, el Obradoiro se puso el mono de faena. Subió su nivel defensivo y, a partir de ahí, empezó a limar su desventaja, que llegó a ser de 15 puntos (13-28, min.12). Con un parcial 7-1, obligó a Sarunas Jasikevicius a pedir tiempo muerto (31-37, min.18).
El Barça, que había bajado su porcentaje de acierto coincidiendo con las rotaciones, continuó atascado. Tras una nueva pérdida de Calathes el Obradoiro armó un rápido contraataque que culminó con un triple desde medio campo de Scrubb, para situarse a solo tres puntos (36-39, descanso).
La vuelta del quinteto inicial oxigenó al líder, que empezó a dominar la pintura y explotó cada pérdida del rival para conseguir canastas fáciles con rápidas transiciones. Volvió a coger ocho puntos de ventaja y Moncho Fernández paró el choque (42-50, min.24). Consiguió minimizar sus pérdidas buscando a Laurynas Birutis, autor de los ocho puntos de su equipo en el inicio del tercer cuarto. Pero Calathes forzó la tercera falta del lituano y su entrenador lo mandó al banquillo.
Sin él, el Obradoiro se apagó. Encajó un parcial 3-15 en los últimos cuatro minutos de ese tercer cuarto que sentenció el choque, con Nico Laprovittola y Mirotic liderando la reacción azulgrana.