GLASGOW, 06 nov.
El actor británico Idriss Elba es un "bocazas", o al menos por tal se tiene, pero quiere usar esa incómoda faceta para defender la necesidad de modificar los hábitos y la producción de alimentos en el planeta como forma de combatir el cambio climático.
"El debate sobre la alimentación debe amplificarse. Y si soy algo, es un bocazas, así que voy a serlo" para que se hable más de este asunto, dijo Elba, quien intervino en la cumbre del clima COP26 en Glasgow (Reino Unido), en su calidad de embajador del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) de la ONU.
Junto a su esposa Sabrina, también embajadora de la FIDA, y a la activista ugandesa Vanessa Nakate, Elba reconoció que a él mismo le irrita ver caras de famosos en un foro como la COP26, pero lo justificó por el hecho de poder usar su popularidad para agitar conciencias por un problema acuciante.
"Me sorprendió ver durante los peores momentos de la pandemia a ciudadanos en Occidente haciendo cola por comida, no debido al cambio climático, sino porque la cadena de suministros se había dañado. Y va a resultar aún más dañada si no resolvemos qué hacer con el cambio climático y con los sistemas alimentarios", dijo.
El intérprete, que se dio a conocer por su papel de Stringer Bell en la serie "The Wire", llamó la atención sobre la situación de los pequeños agricultores, "que producen el 80 % de lo que comemos", porque son ellos quienes se dan cuenta de que "las cosechas son cada vez menores porque la lluvia es diferente, el suelo es diferente... y un día iremos al supermercado y la comida no va a estar ahí".
"Creo que todos podríamos vigilar lo que comemos. Luego depende de cada individuo adoptar (una dieta concreta), pero como sociedad creo que debemos prestarle atención", subrayó el actor, antes de pedir que el continente africano se sitúe "en el centro del debate" sobre la agricultura y la alimentación.
Precisamente la ugandesa Nakate -considerada la "Greta Thunberg" africana- participó dentro de la COP, tras haberse manifestado en días anteriores en el exterior del recinto, para recordar que si los seres humanos adoptasen una dieta basada en los vegetales se reducirían muchas emisiones.
"La agricultura y el uso de la tierra causan juntos el 25 % del total de las emisiones de carbono", afirmo la joven, quien también hizo hincapié en que "para alcanzar el cero emisiones debemos conseguir el hambre cero" en los países en desarrollo.