La multinacional de ingeniería Bosch anunció una fuerte inversión de 462 millones de dólares en tres de sus plantas encargadas de fabricar semiconductores, esto con la intención de acabar con la escasez global de este componente.
La mayor parte de esta inyección de dinero irá a la planta de Dresden, en Alemania, su complejo más reciente.
Además, entre 2021 y 2023 se tiene pensado invertir 173 millones de dólares más con la finalidad de reacondicionar sus plantas de trabajo a nivel global. Además se hará otra inversión de 58 millones en su planta de Reutlingen con la finalidad de remodelar el espacio de limpieza de componentes.
También construirán un nuevo centro de trabajo en Penang, Malasia, que servirá como una estación de pruebas para semiconductores terminados.