El mexicano permitió seis imparables, pero sólo dos carreras.
Jose Urquidy dijo que estaba calmado, enfocado, listo y optimista para abrir el Juego 2 de la Serie Mundial. Y el pítcher mexicano de los Houston Astros cumplió.
Urquidy trabajó por espacio de cinco sólidas entradas, que tampoco fueron las más contundentes, pero suficientes para darle oportunidad a su equipo de ganar 7-2 el miércoles por la noche y empatar la Serie Mundial 1-1, cuando se trasladarán a Atlanta a partir del viernes.
El mexicano permitió seis imparables, pero sólo dos carreras, que debieron ser sólo una, porque la segunda resultó de poner al receptor de los Atlanta Braves Travis d'Arnaud en posición de anotar con un wild pitch.
"Me sentí bien, tranquilo y seguro de que podía sacar outs", dijo Urquidy. "Estaba muy enfocado en lanzar strikes y atacar a los bateadores todo el tiempo en esa zona de strike".