La inhalación prolongada causa severos daños en las vías respiratorias que pueden llegar a causar la muerte.
Los riesgos que generan las fugas de gas butano dentro de los domicilios tienen un alto riesgo de peligrosidad. El butano, también llamado n-butano, es un hidrocarburo saturado, inflamable y gaseoso.
También puede denominarse con el mismo nombre a un isómero de este gas: el isobutano o metilpropano. Como es un gas incoloro e inodoro, en su elaboración se le añade un odorizante que le confiere olor desagradable. Esto le permite ser detectado en una fuga, porque es altamente volátil y puede provocar una explosión.
Procedencia
El butano comercial es un gas licuado, obtenido por destilación del petróleo, compuesto principalmente por butano normal (60%), propano (9%), isobutano (30%) y etano (1%). El gas butano se transporta en la típica bombona o garrafa de butano, un envase cilíndrico que se dilata cuando la temperatura del butano aumenta en exceso, de paredes de acero, normalmente de color naranja, y que contiene 12,5 kg de butano. También existen nuevas bombonas de butano más ligeras, fabricadas con acero inoxidable en lugar de hierro fundido.
Ventajas e inconvenientes
La seguridad de la instalación y manipulación de las bombonas de butano depende de varios factores. Para evitar problemas, es indispensable una correcta manipulación y un óptimo mantenimiento de todos los elementos de la instalación, además del cumplimiento de las revisiones periódicas.
Remplazo
El cambio de bombona se debe realizar siempre con la llave del cabezal cerrada, para que el gas despedido a la atmósfera sea mínimo. Esta operación no se debe realizar nunca cerca de fuentes de calor o de fuego, como velas encendidas, cigarros o estufas.
Las gomas de alimentación que llevan el gas desde las bombonas a las cocinas, calentadores y estufas se deben encontrar siempre en perfecto estado porque la fuga de este combustible puede provocar explosiones o intoxicaciones.
Las revisiones de la instalación de gas butano o propano se realizan cada cinco años. Para ello, se deben solicitar los servicios de un instalador autorizado o de las agencias distribuidoras de la empresa suministradora.
Consecuencias
La inhalación de gas butano provoca somnolencia y posible pérdida de conocimiento. No obstante, estos síntomas no tienen nada que ver con los provocados por la inhalación de monóxido de carbono, la denominada muerte dulce. Este último caso es mucho más peligroso y está provocado por la mala combustión de los aparatos de gas. En cuanto se perciba el olor se debe cerrar la válvula de gas, abrir las ventanas y cerrar la puerta de la estancia. Si por la noche se percibe el olor fuerte de gas y esta obscuro, no encienda ninguna luz pues genera chispa que provocará una explosión segura. En estas fechas decembrina revise las mangueras que no presenten ninguna fuga pues el frió las rompe con facilidad cuando reciben un movimiento brusco. Si presenta alguna fuga, llame a la estación de bomberos.