El seleccionador español de hockey femenino, el inglés Adrian Lock, reconoció el "momento duro" para el equipo tras la eliminación por penaltis ante Gran Bretaña aunque "el orgullo de ser como es superará el dolor que siente ahora".
"Es un golpe de ánimo momentáneo por el resultado. Hoy tuvimos una oportunidad de demostrar lo que podemos hacer, que creo que lo hemos hecho, de darlo todo al cien por cien en cada minuto y lo hemos hecho, pero el resultado a veces no acompaña. El orgullo que siente el equipo por ser como es, una familia, una piña, superará cualquier momento de dolor que estamos sintiendo ahora", afirmó.
Lock, que hoy pudo dirigir desde el banquillo el segundo partido de las "RedSticks" en Tokio tras permanecer confinado por un positivo desde el principio de la competición hasta hace dos días, consideró que aunque siempre quieren "éxitos tangibles un éxito muy grande también es la familia tan estrecha que hemos formado".
"A veces vale más que cualquier resultado. Es algo que el resto de la vida no vamos a olvidar. Nuestro camino ha sido muy grande, hemos cambiado la forma de ser del hockey español femenino y el legado que vamos a dejar a las que van a seguir", dijo a la vez que elogió el trabajo del staff y de las jugadoras que han sido parte del grupo en la preparación de los Juegos y finalmente no han estado en Tokio.
Preguntado por las perspectivas del grupo para el Mundial de 2022 que España organizará de forma conjunta con Países Bajos, Lock auguró "un año muy especial" centro de "un camino que no para".
"Las que son más mayores y recuerdan como éramos cuando empezamos, como competimos en Río y como somos ahora es un camino que no para, aunque hoy hubiéramos hecho otra cosa. Somos pasajeros, si seguimos este mismo camino ya hemos visto que traerá sus frutos y en tres años habrá otros juegos", añadió.