Antes del caso de Moisés David, D’Andrea ya era considerado santo en Nicaragua.
Managua,- Un niño cuya vida probaría la santidad del Siervo de Dios italiano Odorico D’Andrea (1916-1990) murió este domingo a los 11 años, en un departamento (provincia) del norte de Nicaragua, informó la Diócesis de Matagalpa.
El niño Moisés David Sequeira Herrera, conocido en el departamento de Jinotega como “Guerrero de fe”, falleció la mañana de este domingo, según la Iglesia Católica, un día después de que fuera internado en un hospital para una cirugía de emergencia, por tratar un padecimiento que no fue revelado.
La vida de Moisés David, quien nació con hidrocefalia y otras afecciones, es considerada como un milagro en Nicaragua, porque los médicos habían asegurado que nacería muerto o, en caso de sobrevivir, viviría como vegetal y no superaría los cinco años, pero su madre, Heydi Herrera, lo encomendó al fray D’Andrea y creció como un niño normal, muy apegado a la iglesia.
El caso del menor fue estudiado por un comité médico que no encontró explicaciones a su mejoría y ya ha sido presentado ante el Vaticano como el milagro que probaría que D’Andrea es un santo y que merece que su “causa de beatificación” prospere.
La creencia de que D’Andrea es un santo creció en 2006, cuatro años después de que inició el proceso de beatificación, cuando su cuerpo fue exhumado y se observó que estaba incorrupto.
Antes del caso de Moisés David, D’Andrea ya era considerado santo en Nicaragua, debido a múltiples milagros que le son atribuidos, incluido el haber logrado que el municipio de San Rafael del Norte fuera una zona “de paz”, cuando el país estaba en guerra en los años 80 del siglo pasado.