Machado reserva además al centrocampista ecuatoriano Juan Ramón Cazares, que se ha convertido en el principal creativo del Fluminense y desplazó de la titularidad al veterano Nené.
Asunción,-Cerro Porteño y Fluminense afrontan su primer duelo de octavos de final de la Copa Libertadores, el martes en Asunción, marcados por las bajas, si bien las de los brasileños son cualitativas debido a la ausencia de Fred, su principal anotador.
Los paraguayos no cuentan desde la semana pasada con uno de sus motores, el defensa en ataque Santiago Arzamendia, que firmó por cuatro temporadas con el Cádiz de España.
El entrenador Francisco Arce tampoco podrá recurrir en este partido de ida al centrocampista Juan Patiño, por acumulación de amonestaciones en el torneo, ni de otra de sus piezas en la media, Ángel Cardozo Lucena, lesionado durante su actuación en la selección en la Copa América.
En el frente de la delantera el exseleccionador nacional alinearía al argentino Mauro Boselli, apoyado por Claudio Aquino y en el centro por el internacional Mathías Villasanti, otro de los fijos en el Ciclón.
El cuadro de Barrio Obrero afronta la competición tras una discreta participación en el Apertura local, con las esperanzas de llegar a lo más alto en la Libertadores y apostando de firme por el Clausura, que da comienzo este fin de semana.
Por parte brasileña, a la exclusión de Fred, con molestias tras el encuentro con el Ceará por el campeonato brasileño, se suma la de sus otros dos goleadores: el uruguayo Abel Hernández y el paraguayo Raúl Bobadilla.
El técnico del Fluminense, Róger Machado, ya hizo constar a los medios que su única opción en el ataque es el juvenil Lucca, autor de los dos goles con los que el equipo se impuso por 1-2 el sábado al Sport por el Campeonato Brasileño tras haber iniciado el partido en el banquillo.
Machado reserva además al centrocampista ecuatoriano Juan Ramón Cazares, que se ha convertido en el principal creativo del Fluminense y desplazó de la titularidad al veterano Nené.