González señaló que México se ha distanciado de la OEA "por su conflicto con (el secretario general, Luis) Almagro", al que no apoyó en su reelección.
CIUDAD DE MÉXICO,- La crisis política, social y económica que vive Nicaragua demuestra que "México debe recalibrar su postura" sobre la situación. Incluso, la comunidad internacional debe leer el problema con otros ojos, "no entre izquierdas ni derechas", fueron las posturas en el foro"Los ataques a la democracia en América Latina: el caso más reciente Nicaragua".
El panel se realizó con los moderadores Rafael Fernández de Castro, Director de USMX, el director Sergio Alcocer, Presidente del COMEXI; además participaron Gema Santamaría, de Loyola University; Guadalupe González, de El Colegio de México, y Jorge Álvarez, exembajador del COMEXI, además del periodista Carlos Chamorro, quien fue perseguido en su país por el presidente nicaragüense, Daniel Ortega.
Sobre el conflicto en Nicaragua y en América Latina, Santamaría afirmó que la región ya no se entiende entre izquierda o derecha, puesto que hay acciones que realizan unos u otros gobiernos que se caracterizan así, que no corresponden a esas ideologías.
En Nicaragua, aseguró, "no hay una izquierda gobernante", por lo que se necesitan "otros lentes" para analizar la situación. "Ya no es el sandinismo" el que gobierna Nicaragua, señaló, sino que hay un "régimen que busca acallar a la oposición, coartar la libertad de expresión".
El exembajador Álvarez también coincidió que la "crisis" se debe ver "con otros ojos en el ámbito internacional, no entre izquierda ni derecha". Además, indicó que "se carece de un análisis profundo en México".
Los panelistas también recalcaron que hay una "notoria decadencia" de las "condiciones democráticas en América Latina".
Santamaría recordó que la crisis en Nicaragua no inició ni en 2018, cuando fueron las protestas contra el gobierno, que fueron reprimidas, sino que se remonta a desde el año "2000", cuando hubo "un pacto entre el Partido Liberal y el sandinista". En esta época, Ortega volvió al poder.
"La democracia ha sido erosionada" y "el proceso electoral es una farsa", señaló Santamaría, de Loyola University.
El periodista Carlos Chamorro hizo un recuento de las últimas acciones de Ortega en su país: "Está decidiendo eliminar a la competencia política. El régimen está decidiendo que no habrá competencia". Además, afirmó, que en la nación hay "un estado policial de facto", y una "recesión económica".
Los últimos arrestos de precandidatos y otros líderes de la oposición, dijo el periodista, "son el último zarpazo de la posibilidad de una vía electoral". "Ortega se va a reelegir sin democracia", afirmó.
Chamorro señaló que la "OEA tiene la capacidad de convocar a los cancilleres", pero también hay muchas preguntas sobre el papel de actores como México y Argentina.
González, de El Colegio de México, recordó que la República mexicana fue un referente en "1979 hasta principios de los 90s". Sin embargo, "en la actualidad, México asume un papel ambiguo" y es que la nación "aún no acaba de cuadrar el círculo de su papel en la región".
Y es que "asumir que hay probabilidades de diálogo (en Nicaragua) es no entender la situación, ¿sobre qué sería el diálogo?," cuestiona.
México y Argentina han dicho que es necesario impulsar un diálogo con el gobierno de Ortega para superar "esta situación por la vía pacífica".
También, González señaló que México se ha distanciado de la OEA "por su conflicto con (el secretario general, Luis) Almagro", al que no apoyó en su reelección.
Los panelistas recordaron que en una última votación sobre la crisis en Nicaragua en la OEA, México se abstuvo y si bien llamó a consultas a su embajador, eso no es solución.
La situación, en palabras de Fernández de Castro, es que hay una "América Latina sin voz ni liderazgo". Incluso, la situación en Nicaragua "no pasa por la opinión pública de México".
En este sentido, González mencionó que "cada país está metido en sus problemas", por lo que una vía para solucionar el problema sería en la "movilización de los autores no gubernamentales", además recalcó que un gran apoyo se daría en las instancias de derechos humanos.
Sobre un apoyo de la comunidad internacional, González indicó que si bien hay posiciones de Estados Unidos y de la Unión Europa (UE), "falta coordinación". "La comunidad internacional no cuenta con grandes instrumentos" para hacer algo, dijo.
Alcocer concluyó que estos problemas en América Latina deben abordarse de forma permanente, "no por picos".