Antes va por una última batalla
Estados Unidos. Una vida feliz no es factible sin un poco de oscuridad, decía el psiquiatra suizo Carl Gustav Jung, algo que Giannis Antetokounmpo sabe mejor que nadie. El griego soportó una tormenta de infortunios en sus primeras siete temporada en la NBA y por fin se encuentra a las puertas de sus primeras Finales, no sin antes tener que librar una última batalla en el Este ante los sorprendentes Hawks de Trae Young, una naciente rivalidad que promete convertirse en una saga de antología.
Aunque el griego llegó a la liga en el ya lejano 2013 aún tiene 26 años, por lo que por más desgastante que haya sido el andar en sus primeros años, aún tiene un futuro promisorio por delante, sobre todo si logra por fin dejar atrás el mito griego de ser un MVP incapaz de dar el salto a la élite. Antetokoumpo parece que tiene el camino más despejado que nunca para lograrlo, especialmente con el triunfo que lideró ante los Nets.
El griego salió vencedor de un épico duelo ante Kevin Durant con el que Milwaukee eliminó a Brooklyn en el séptimo partido de las Semifinales de la Conferencia Este. Ese triunfo, consumado en una dramática prórroga, sacó a KD y las otras dos superestrellas de Brooklyn James Harden y Kyrie Irving —lesionados— de la contienda por el título en la que tampoco están ya Joel Embiid y sus 76ers, apeados por el inesperado vuelo de los Hawks.