Paraguay se ha limitado, al menos de manera pública, a pedir diálogo y respeto a los textos fundacionales del Mercosur.
Asunción,- El canciller paraguayo, Euclides Acevedo, reconoció este martes que las relaciones en el Mercosur, integrado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, están "quietas", tras los últimos roces entre los miembros por los cambios en el arancel externo común (AEC).
No obstante, y preguntado por ese estancamiento, Acevedo expresó su seguridad de que será solventado.
"Claro que se va a arreglar", dijo en unas declaraciones tras un acto en el Palacio de Gobierno.
La Cumbre de Cancilleres se pospuso sin fecha la semana pasada, después de haber sido postergada ya anteriormente, y se desconoce también cuándo se celebrará la Cumbre de Presidentes, prevista para este mes y en la que Argentina deberá pasar la presidencia rotatoria a Brasil.
Las diferencias en las relaciones del grupo se evidenciaron en marzo, durante el encuentro virtual para celebrar los 30 años de la creación del Mercosur, y quedó patente después en los desacuerdos sobre el AEC y la agenda de negociaciones externas.
A eso se suman las discrepancias entre los dos grandes países del bloque, Brasil y Argentina, tanto políticas como comerciales, ya que mientras Brasil pide una reducción arancelaria sustancial y amplia, Argentina apuesta por rebajas más moderadas y selectivas, y mantiene su tendencia proteccionista.
Además, la semana pasada, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, comentó que Argentina se encuentra en "una situación bastante complicada" debido a que "el personal allá decidió votar por quienes hundieron al país en un hueco", en alusión al presidente Alberto Fernández.
En contraposición, ensalzó el "buen trabajo" del mandatario de Uruguay, Luis Lacalle Pou, ya que este país se muestra alineado con la posición de Brasil y ambos abogan por flexibilizar las normas para permitir la negociación de acuerdos comerciales con otros mercados de manera independiente.
En este contexto, Paraguay se ha limitado, al menos de manera pública, a pedir diálogo y respeto a los textos fundacionales del Mercosur.
La próxima cumbre semestral del Mercosur, a la espera de fecha, tendrá esos temas sensibles encima de la mesa, mientras la pandemia de coronavirus sigue avanzando en la región.