"Es indolente (el Mecanismo de Protección de la Segob) ante la violencia que se vive en el país"
OAXACA, Oax.,- El periodista Gildo Garza, de la Asociación Mexicana de Periodistas Desplazados y Agredidos, informó que el hijo de 15 años de edad del periodista Gustavo Sánchez Cabrera, asesinado el pasado 17 de junio en Morro Mazatán, se encuentra amenazado de muerte tras ser testigo del homicidio de su padre.
A través de una videograbación, aseguró que estas amenazas son graves porque tanto el menor de edad como su familia se encuentran en situación de riesgo.
Es por eso que a nombre de la Asociación Mexicana de Periodistas Desplazados y Agredidos exigió al Mecanismo de Protección de la Secretaría de Gobernación que realice las acciones necesarias para sacar a la familia de esa localidad del Istmo de Tehuantepec de Oaxaca.
La protección al menor y la familia del periodista Gustavo Sánchez, dijo, debe realizarse conforme a la normatividad internacional que considera la atención de las víctimas y sus deudos, "quienes en este caso también se encuentran en situación de riesgo, en estos momentos".
Gildo Garza también acusó de negligencia al Mecanismo de Protección a Personas de Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas de la Secretaría de Gobernación (Segob); comentó que su accionar "fue criminal" porque el resultado fue el asesinato del periodista.
"Es indolente (el Mecanismo de Protección de la Segob) ante la violencia que se vive en el país", dijo.
Recordó que Sánchez Cabrera denunció amenazas y ataques armados en su contra que ponían en riesgo su vida y, pese a ello, tenía medidas endebles desde el 2017. Aseguró que las autoridades no le dieron seguimiento al caso, ni siquiera comprobaron si la empresa encargada de brindarle atención y seguridad seguía realizando su trabajo.
"Fue hasta mayo pasado que le ofrecieron un chaleco antibalas y protección del Estado, a pesar de que había sido víctima de un ataque armado desde 2019, medidas que no llegaron a tiempo para salvarlo del trágico final que tuvo el pasado 17 de junio en Morro Mazatán, Tehuantepec, donde fue acribillado.
"El 16 de junio fue el último correo que recibió por parte del Mecanismo de Protección a Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas en México, diciéndole ya merito llegamos y un día después fue asesinado a tiros enfrente de su hijo", señaló.
Reiteró que el hijo del periodista asesinado, de sólo 15 años de edad está amenazado porque fue testigo del asesinato de su padre, "lo cual es sumamente grave y doloroso para la familia que ni siquiera puede vivir su duelo en paz".
Gildo Garza cuestionó que cuántos periodistas más o cuántas familias más tienen que morir para que se cumpla con lo que dicta la ley y se acorten los tiempos burocráticos; para que, subrayó, realmente se cumplan las medidas de protección en México en menos de 72 horas.
Adelantó que la Asociación Mexicana de Periodistas Desplazados y Agredidos buscará fincar responsabilidades administrativas y judiciales "ante la clara negligencia cometida por las autoridades encargadas de proteger y salvaguardar la integridad de periodistas y defensores de derechos humanos".