Responsable
“Un crimen que yo lamento mucho en Cajeme, y del cual resulto, de acuerdo a la visión de este partido (Movimiento Ciudadano), el responsable, no sé si utilizaron la palabra culpable, porque puede ser que sea responsable, pero no culpable. Ni siquiera llegan a propaganda, no pasan de ser actitudes publicitarias, muy irresponsables, no tienen efecto”.
Tales fueron las palabras del presidente Andrés Manuel López Obrador, al asegurar que en el caso del asesinato de Abel Murrieta, candidato de Movimiento Ciudadano (MC) a la alcaldía de Cajeme, Sonora, puede ser responsable pero no culpable.
Como se recordará, Murrieta fue ultimado mientras hacía proselitismo, sobre lo cual el coordinador nacional del MC, Clemente Castañeda, responsabilizó al Ejecutivo federal y a Claudia Pavlovich, gobernadora de Sonora.
Al respecto, AMLO añadió que debido a que hay un proceso electoral vigente, hay acusaciones que, aseguró, no tienen ningún efecto, las cuales calificó de irresponsables y dijo que “no les ayudan a los partidos, (pues) no han entendido de que ya cambió la situación en el país, repito y repito de que no se puede poner vino nuevo en botellas viejas y no lo entienden”.
El presidente puede tener razón. Tal vez no es directamente el culpable del crimen contra el candidato, pero responsabilidad sí tiene, y mucha.
A principios de marzo, acompañado por Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad, López Obrador anunció su “plan de protección de la delincuencia organizada y de cuello blanco a candidatos de todo el país rumbo a la elección del próximo 6 de junio”.
Los resultados han dejado mucho qué desear.
Durante el actual proceso electoral que inició en septiembre de 2019, y hasta abril de 2021, se habían registrado 169 incidentes de violencia política, de acuerdo con un recuento de Integralia Consultores; en estos atentados, hubo 210 víctimas de las cuales 143 fueron mortales.
El mismo AMLO actualizó hace días en su “mañanera” que han sido asesinados 13 candidatos en estas elecciones de 2021, habiendo además 144 casos relevantes y 158 casos clasificados como preventivos.
Por supuesto, el eslabón más importante en la cadena de seguridad tanto a políticos como ciudadanos son los municipios, pero no puede hacerse de lado la innegable participación que tiene la Federación, tanto en el reforzamiento de los espacios más básicos como en la misma intervención en casos de gravedad.
Así como el presidente ha reconocido meter las manos en el actual proceso electoral para denunciar presuntos fraudes o compra de votos, es urgente su involucramiento en una real protección a los participantes, la cual no debe distinguir entre colores ni ideologías.
Como primer mandatario, López Obrador es de los primeros responsables sobre lo que ocurra en el país y dado que como él asegura, nada pasa en México sin que se entere el presidente, es hora que asuma esta responsabilidad y garantice un proceso limpio también en el plano de seguridad. ¿O usted qué opina?
Macroeditor Web
@afchavezfelix