Kardashian ignoraba por completo que su nombre estaba relacionado con la compra de una pieza arqueológica
CIUDAD DE MÉXICO,- Kim Kardashian se enfrenta a un nuevo escándalo, pero esta vez no está relacionado con los reflectores del espectáculo, sino con el de la protección de patrimonio cultural.
La estrella de reality show está siendo señalado como la dueña de una estatua que data entre el siglo I o II a.C. Se trata de una media escultura de unas piernas con una túnica drapeada que llega hasta los pies.
Italia recientemente declaró la pieza como un tesoro cultural, por lo que las autoridades de Estados Unidos buscan recuperarla y devolverla, pero Kardashian asegura no tener conocimiento sobre la compra de la pieza.
¿Cómo es que Kim Kardashian está involucrada?
Todo empezó en 2016, cuando en EU se recibió un cargamento de 5.5 toneladas de arte y antiguedades en 2016. El lote de 40 piezas estaba valuado en 745 mil 882 dólares, reporta el medio Artnet, y estaba catalogado bajo la tarifa de "antiguedades que exceden los 100 años de antiguedad", pero no se mencionó que había piezas arqueológicas, detalla la fuente.
Al ser inspeccionado, las autoridades de la aduana identificaron irregularidades en el papeleo de "Fragment of Myron’s Samian Athena", la estatua, que según se indicaba había sido comprada por Kim Kardashian, bajo el nombre de Noel Roberts Trust, el patronato bajo el que Kardashian ha adquirido otras piezas de arte.
La pieza fue adquirida en la galería homónima del diseñador belga Axel Vervoordt, quien se encargó de decorar la famosa mansión minimalista que posee Kim Kardashian en Calabasas, California.
De acuerdo a las autoridades, hay varias irregularidades y versiones sobre cómo fue comprada la estatua. Vervoordt asegura que la adquirió en una galería francesa, la cual la obtuvo de una galería alemana, detalla Artnet.
Kanye West, el responsable
De acuerdo al portal de espectáculos TMZ, una persona cercana a Kim Kardashian aseguró que la celebridad no tuvo nada que ver en la compra de la estatua italiana, sino que fue su futuro exesposo Kanye West quien la compró bajo su nombre.
De acuerdo a la fuente, Kardashian ignoraba por completo que su nombre estaba relacionado con la compra de una pieza arqueológica, ni de la existencia de la pieza en sí. El allegado de la también empresaria declaró que Kim está abierta a cooperar con las autoridades para resolver la situación inmediatamente.