Kirguistán y Tayikistán acordaron hoy el cese total de las hostilidades y el repliegue de las tropas de la frontera común.
La presidenta de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), la ministra de exteriores sueca Ann Linde, celebró el alto el fuego entre Kirguistán y Tayikistán, y lamentó la perdida de vidas en los enfrentamientos, que se han saldado con al menos 43 muertos."Celebro el acuerdo de alto el fuego entre las partes y la voluntad política de resolver el asunto con medios pacíficos y diplomáticos, respetando el derecho internacional", señala Linde en un comunicado difundido por la OSCE.
Linde llamó a Kirguistán y Tayikistán, ambos Estados pertenecientes a la OSCE, a reducir la tensión, abstenerse de cualquier violencia y buscar una solución estable a las diferencias.
La ministra sueca, que conversó por teléfono con los responsables de Exteriores de ambos países, asegura que la OSCE está preparada para apoyar los esfuerzos para mantener el alto el fuego y estabilizar la situación en la frontera.
También destacó la importancia de recuperar la confianza entre ambos países y evitar discursos de odio y retóricas que alienten el conflicto.
Kirguistán y Tayikistán acordaron hoy el cese total de las hostilidades y el repliegue de las tropas de la frontera común después de los choques armados del jueves.
Según el Gobierno kirguís, en los choques fronterizos murieron 33 kirguises y otros 166 resultaron heridos.
Las autoridades de Taykistán no han ofrecido cifras de víctimas tayikas, que según medios de ese país ascenderían a hasta 10 muertos y más de 90 heridos.
Los recurrentes conflictos en la zona obedecen fundamentalmente a que de los 972 kilómetros de frontera que comparten estas dos antiguas repúblicas soviéticas de Asia Central han sido demarcados solo 519.