Mediante una tarjeta informativa, el funcionario insistió que el PANAUT busca combatir los delitos de extorsión.
Al igual que el presidente Andrés Manuel López Obrador, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) se lanzó contra el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai), luego que determinó impugnar la creación del Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (PANAUT).
El subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía Berdeja, acusó que la decisión del Inai de recurrir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), obedece a intereses de empresas telefónicas y "favorece un modelo favorable a los delincuentes".
Mediante una tarjeta informativa, el funcionario insistió que el PANAUT busca combatir los delitos de extorsión, secuestro, trata de personas y en general todas las actividades de operación de los grupos criminales.
"La resolución del Instituto Nacional de Acceso a la Información sólo acredita la decisión de este órgano por ajustarse a los intereses de las telefónicas, favorecer un modelo favorable a los delincuentes", arremetió.Mejía Berdeja aseguró que cada persona tendrá el control de su identidad y los archivos serán responsabilidad del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y la protección de datos estará a cargo del Inai.
"Este órgano debe actuar con responsabilidad, asumir su función, dejar la indolencia y trabajar para proteger los datos personales en posesión de particulares y los sujetos obligados", consideró.Mejía Berdeja confió en la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que, en beneficio de las víctimas del delito y la seguridad de la población, confirme la constitucionalidad del Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil, una vez que revise la impugnación que alista el Inai.
Reiteró que detrás del rechazo están involucradas las empresas telefónicas cuando actualmente solicitan los datos a quienes adquieren una línea telefónica de renta fija, piden los datos personales.
"El problema de fondo son los modelos de telefonía de prepago por medio de los cuales nadie sabe quién los está comprando, por lo que ha permitido que los delincuentes se dediquen a hacer llamadas de extorsión, entre otras conductas criminales".