Excluir de las competiciones nacionales e internacionales a los clubes que aceptaron la creación de una Superliga europea, una opción que plantean la FIFA, la UEFA y varias federaciones nacionales, es una medida a descartar en la presente temporada deportiva y potencialmente controvertida también a largo plazo.
Así lo aseguró este lunes a EFE el abogado Angelo Cascella, experto en derecho deportivo nacional e internacional que lleva años cuidando los intereses de clubes y profesionales del fútbol, quien excluye además que, tras el anuncio de este domingo, los clubes involucrados en la creación de la Superliga puedan volver atrás.
"Si han tomado esta decisión, dudo mucho que vuelvan atrás. Significa que tienen una organización clara. Ellos piensan fundar una nueva competición autónoma que les permita maximizar los ingresos económicos que les ofrece la difusión planetaria del fútbol", dijo Cascella.
FIFA, UEFA y varias federaciones nacionales han amenazado con la exclusión de los clubes inscritos en la Superliga de las competiciones ligueras e internacionales. Una amenaza que se extendería también a la Eurocopa y al Mundial, lo que pone en una encrucijada a los futbolistas.
Sin embargo, según Cascella, a nivel legal es inviable aplicar estas sanciones a corto plazo.
"Yo, club que participo en el presente campeonato, ¿qué habría hecho para que se me castigue? ¿Cuál sería la violación? Yo participé en el presente campeonato. ¿A qué me negué? No veo con qué base una federación podría sancionar a un club que participó en su liga", dijo.
"Y no veo cómo pueden sancionar a los clubes que siguen participando en la Liga de Campeones", agregó.
El abogado italiano sí ve posibles estas sanciones a largo plazo, aunque todo depende de los acuerdos que los clubes y las federaciones tengan firmados con UEFA y FIFA.
"Lo que pasará en el futuro depende de los acuerdos firmados con la UEFA. Aunque eso es cuestión de las federaciones con la UEFA, más que de los clubes individuales", explicó.
También es necesario preguntarse si excluir de los grandes torneos de la FIFA y la UEFA a los mejores jugadores del mundo realmente dará beneficios.
"¿Podrá la UEFA impedir a los mejores jugadores participar en la Eurocopa? ¿Podrá la FIFA impedir que los mejores jugadores estén en el Mundial? Y si lo hacen, ¿quién vería un Mundial sin Lionel Messi, Neymar Junior, Cristiano Ronaldo o Kilyan Mbappé?", subrayó Cascella.
En las últimas horas se multiplican las críticas a la decisión de doce de los clubes más importantes de Europa, entre los que se encuentran Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, Juventus, Inter de Milán y Milan, de crear una nueva competición, la Superliga, en la que participarían desde el próximo agosto hasta 20 equipos, con partidos entre semana para respetar las competiciones nacionales.
Entre las reacciones están también las de varios futbolistas, como los españoles Ander Herrera y Luis Alberto, y el alemán Mesut Ozil, quienes destacaron cómo se enamoraron "de un fútbol popular" en el que los equipos pequeños tienen derecho a soñar con medirse con los más grandes.
"En este momento los futbolistas se sienten desorientados. Un futbolista debe entender qué pasa, porque le interesa ganar dinero, pero también participar en las grandes competiciones como Mundiales o Eurocopas", afirmó Cascella, quien cuidó los intereses de varios jugadores y técnicos de elite.
El nuevo formato y las ideas clave en las que se basa la nueva Superliga tienen elementos muy parecidos a los de la Euroliga de baloncesto y, aunque en menor medida, a la NBA estadounidense.
Sin embargo, reformar el sistema del fútbol en Europa y lanzar una normativa como la del tope salarial es inviable.
"El tope salarial de la NBA en Europa no es posible. Si se permite aplicar el Juego Limpio Financiero, no se puede imponer un tope salarial porque las normativas europeas no lo permiten", afirmó.