Lo que quieren saber los mandatarios regionales es si se puede compensar con otras medidas o no
Sevilla (España),- Las limitaciones de aforo condicionan la reapertura de la plaza de toros de La Maestranza, en Sevilla (sur de España), una de las más emblemáticas del mundo, que sigue en el aire a la espera de que se aclaren las posibles interpretaciones de la norma de distanciamiento social.
El Gobierno regional de Andalucía pidió una aclaración al Ministerio de Sanidad sobre las distancia de un metro y medio en espectáculos públicos regulada en una ley estatal que entró en vigor el 30 de marzo, pues aunque la norma establece "nítidamente" dicha distancia puede "llevar a cierta interpretación".
Lo que quieren saber los mandatarios regionales es si se puede compensar con otras medidas o no.
La temporada taurina en Andalucía arranca en Sevilla en abril y la empresa Pagés, que gestiona La Maestranza, considera inviable la superación mínima de metro y medio entre espectadores, por lo que presentó un plan en el que plantea obligar a los espectadores a estar vacunados o a presentar una prueba de PCR para poder contar con la mitad de su aforo, 5,597 localidades.
La polémica se debe a que los empresarios dicen que con mayores limitaciones no es rentable abrir porque implicaría reducir el aforo de La Maestranza a 1,362 personas.
Esta situación provocó también reacciones entre los toreros, entre ellos el diestro peruano Andrés Roca Rey, que denunció este martes que “el trato discriminatorio que está sufriendo la fiesta de los toros respecto a otros sectores de la cultura no responde a intereses sanitarios” y que recordó que "miles de familias" en España “dependen de un sector señalado y olvidado por intereses políticos”.
Roca Rey se sumó así a las manifestaciones de José Antonio Morante de la Puebla, con quien está anunciado el próximo domingo en Sevilla junto a Pablo Aguado para matar una corrida de toros de Victoriano del Río a expensas de lo que se decida sobre las medidas sanitarias.
“Celebro la idea de mantener abiertas las salas de cine, los teatros, los museos, la ópera, las salas de conciertos, las galerías de arte”, afirmó el torero limeño, quien a la pandemia suma una larga inactividad de casi dos años por lesión.
Andrés Roca Rey reclamó "respeto y consideración hacia el mundo de la tauromaquia” y que, puesto que el toreo depende del Ministerio de Cultura, se le “impongan exactamente las mismas condiciones que a cualquier otro espectáculo cultural”.
José Antonio Morante 'Morante de la Puebla', por su parte, se quejó de que en el Gobierno regional de Andalucía "se asustan, como en Madrid".
"La Junta de Andalucía está poniendo muchos problemas y a día de hoy no sé si voy a poder torear este domingo en La Maestranza", dijo en una entrevista a una radio española, antes de recordar que en otras regiones se permiten que se celebren las corridas con el 75 % del aforo.
El diestro mantuvo que "la norma nacional dice que hay que guardar un metro y medio siempre que sea posible" y que ello "deja un vacío interpretable que no quiere interpretar la Junta de Andalucía", y aseveró que "esa desidia" le "indigna" porque Sevilla es su tierra y "la Meca del toreo".
En los últimos días también terció en la polémica la Unión de Criadores de Toros de Lidia, que solicitó a las autoridades sanitarias y gubernativas de Andalucía una mayor flexibilidad en la aplicación de las medidas de seguridad e higiene vigentes en materia de espectáculos públicos.
Según los datos que maneja la Unión de Criadores, las pérdidas económicas ya superan los 150 millones de euros al estar prácticamente paralizada la actividad, lo que también está ocasionando que muchas de las ganaderías "se vean obligadas a su desaparición con el desastre ecológico y genético que ello supone".