Una falta de pegada que condenó a los de croata Niko Kovac, que dio entrada al español Cesc Fàbregas a falta de media hora para el final
Redacción deportes,- El Mónaco certificó su clasificación para los cuartos de final de la Copa de Francia, tras imponerse este martes por 5-4 en la tanda de penaltis al Metz, en un encuentro que concluyó con empate (0-0) el tiempo reglamentario.
Y es que en poco o nada se pareció el encuentro al que ambos equipos disputaron ambos conjuntos el pasado sábado, correspondiente a la Ligue 1 y en el que el Mónaco se impuso por un contundente 4-0.
A diferencia del choque liguero, el conjunto monegasco, pese a llevar en todo momento la iniciativa del juego, careció de la efectividad para convertir alguna de las claras ocasiones de las que dispuso durante los noventa minutos.
Cuando no fue el portero argelino Alexandre Oukidja, que evitó a lo 32 minutos con una sobresaliente parada el gol de Youssouf Fofana, fue la madera, como en un remate del montenegrino Stevan Jovetic a los 81 minutos, quien evitó el gol del Mónaco.
Una falta de pegada que condenó a los de croata Niko Kovac, que dio entrada al español Cesc Fàbregas a falta de media hora para el final, a jugarse el todo por el todo en la tanda de penaltis.
Rueda de penas máximas en la que el Mónaco transformó los cinco lanzamientos que intentó y el Metz falló uno el cuarto, ejecutado por el centrocampista marfileño Habib Maiga que envió el balón por encima de la portería.
Un fallo que Stevan Jovetic no desaprovechó para poder el defintivo 5-4 que permitió la clasificación del Mónaco para unos cuartos de final, en los que el París Saint-Germain, tras vencer el pasado mes de marzo por 3-0 al Lille.