Los cubanos se enfilaron a este cruce fronterizo donde fueron recibidos para revisar su estatus migratorio y todos pudieron cumplir el sueño americano
REYNOSA, Tamps.- Durante dos años, Yoandrys Bolaño se dedicó a defender los derechos de los cubanos que buscaban cruzar a Estados Unidos para tener una mejor calidad de vida.
En este tiempo, los más de 400 cubanos que se asentaron en Reynosa, Tamaulipas, se dieron a la tarea de cumplir con los requisitos para que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, les concediera una visa humanitaria o asilo político.
La madrugada del domingo, 60 cubanos recibieron una llamada telefónica para informarles que debían presentarse en el Puente Internacional Reynosa-Hidalgo para ingresar por fin a Estados Unidos, entre ellos, Yoandris.
Apenas amaneció, los cubanos se enfilaron a este cruce fronterizo donde fueron recibidos para revisar su estatus migratorio y todos pudieron cumplir el sueño americano.
Para Yoandrys, los sentimientos se agolpan pues aunque pensó que estaría feliz, dice sentirse nostálgico por todos aquellos que no lograron cruzar y los amigos que dejó en Reynosa.
"Nos llamaron a las 12 de la noche, fue una sorpresa. Nos recibieron muy bien para las entrevistas. En mi caso, me hicieron un poco más de preguntas porque sabían que tenía un liderazgo en la frontera".
Dice sentirse tranquilo porque sabe que se encuentra legalmente en Estados Unidos gracias a que nunca promovió las manifestaciones ni la violencia en las fronteras para lograr sus objetivos.
"Mi recomendación para los cubanos y migrantes de otros países que están en México, es que no utilicen la violencia, que sean pacientes porque Dios les va a permitir cumplir sus sueños, siempre y cuando lo hagan con orden, siguiendo la ley. Dios escucha a los migrantes".
Yoandrys se establecerá en Austin, Texas, donde cuenta con amistades que le proporcionarán alojamiento en tanto consigue independencia económica.
"Voy a basar mi vida en relación al arte, pintar mis obras, montar mis exposiciones. Quiero agradecer a Reynosa, a toda la gente de esa frontera porque siempre nos trataron con humanidad, porque son una ciudad que brinda apoyo al migrante, estoy agradecido por haberme soportado tanto tiempo en su tierra".