El presidente de Argentina, Alberto Fernández, participó este sábado en un homenaje a trabajadores desaparecidos durante la última dictadura militar (1976-1983).
"Recordar a los trabajadores, a los que fueron parte del movimiento obrero, que han dejado su vida en esa lucha, es muy importante", dijo Fernández en el acto, realizado pocos días antes de conmemorarse en Argentina los 45 años del golpe de Estado perpetrado el 24 de marzo de 1976.
El mandatario afirmó que aquel día empezó "la mayor tragedia de la sociedad argentina" y que ésta no se debe olvidar "nunca".
"El 24 de marzo se produjo un quiebre moral en la condición democrática argentina que nunca debemos olvidar y nunca debemos dejar de repudiar", sostuvo Fernández, quien lamentó que aún haya "negacionistas" de lo que ocurrió durante la dictadura.
En el acto se recordó que durante el régimen militar obreros y dirigentes gremiales fueron perseguidos y en muchos casos detenidos, torturados y desaparecidos, incluso con la complicidad de empresarios.
"Se trataba de trabajadores y representantes gremiales que lo que buscaban es lo mismo que buscan hoy quienes trabajan, una sociedad más igualitaria, mejores derechos y mejores condiciones de vida", sostuvo Fernández.
En el homenaje participaron integrantes de distintos organismos de derechos humanos, como Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, y Estela de Carlotto, titular de las Abuelas de Plaza de Mayo, que participó de forma virtual, además de dirigentes sindicales como Héctor Daer, de la Confederación General del Trabajo.
El acto se realizó en el Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos que funciona en las dependencias de la antigua Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), en Buenos Aires, donde funcionó el mayor centro clandestino de detención de la última dictadura.
"Yo lo que les pido a todos es que cada 24 de marzo recordemos el horror que vivimos. (...) Quiero que nadie olvide a cada una de las víctimas de algo que no fue una guerra, fue terrorismo de Estado", dijo el presidente.
El Gobierno de Fernández anunció en diciembre pasado la postulación del complejo de la exESMA para que sea reconocido como patrimonio mundial de la Unesco.
La exESMA, por donde pasaron unas 5.000 personas detenidas ilegalmente por la dictadura -muchas de ellas desaparecidas-, fue convertido en Espacio de la Memoria en mayo de 2015, durante el Gobierno de Cristina Fernández (2007-2015), y alberga, entre otros, espacios de exhibición y archivos relativos a los derechos humanos.