Mónica fue torturada sexualmente una vez más y le dijeron que en el lugar donde serían internados serían asesinados por otras personas privadas de libertad
SALTILLO, Coah.,- Un Primer Tribunal Unitario de Coahuila confirmó la sentencia absolutoria para Mónica Esparza, una joven que pasó siete años encarcelada por delitos que no cometió y por los que sufrió de tortura sexual cuando fue detenida en 2013.
De acuerdo con información del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez A.C, Mónica Esparza fue detenida el 12 de febrero de 2013 por cuatro hombres y una mujer que tripulaban una patrulla de la policía municipal de Torreón mientras viajaba, con su pareja y su hermano, a bordo de una camioneta propiedad de su padre, hasta el 12 de marzo de 2021, pudo lograr su sentencia absolutoria tras haber sido torturada sexualmente y obligada a escribir una confesión de delitos.
Mónica, su pareja y su hermano fueron torturados de manera brutal y encerrados en los baños de las oficinas de la Dirección de Seguridad Pública.
Luego de ser interceptados la policía los llevó a la Dirección de Seguridad Pública de Torreón, específicamente a una bodega en donde introdujeron primero a la pareja y al hermano de Mónica, mientras ella se quedó en la camioneta por aproximadamente dos horas. Posteriormente llegó un oficial, y mientras amenazaba con asesinarla, la introdujo a la bodega en donde estaban su hermano y su pareja.
Ya en la bodega y después de que le retiraran la prenda que le cubría la cara, Mónica pudo ver que tanto su hermano como su pareja habían sido torturados; en el lugar había hombres vestidos como militares y como policías municipales.
Cuando estaban encerrados en un baño, se presentó una persona que se identificó como actuario del Poder Judicial de la Federación, les dijo que la madre de Mónica había presentado una demanda de amparo a efectos de que cesaran los actos de tortura e incomunicación y que lo tenían que ratificar para no seguir en calidad de desaparecidos. El actuario se fue tan pronto recabó sus firmas.
--Tortura sexual
Mónica fue torturada sexualmente una vez más y le dijeron que en el lugar donde serían internados serían asesinados por otras personas privadas de libertad.
Al momento de ser trasladados a la PGR, en el camino, la pareja de Mónica murió frente a ella a causa de la tortura infligida. Al llegar a la PGR, los policías se llevaron el cuerpo, sin que Mónica sepa, hasta la fecha, qué hicieron con él.
Sin decirle los cargos que pesaban sobre ellos, Mónica y su hermano fueron trasladados en avión a la Ciudad de México. En las oficinas de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), un agente del Ministerio Público de la Federación amenazó con hacer matar a su madre y sus hijas si no firmaba la hoja que le puso a la vista, por lo que firmó lo que después supo era una confesión de delitos.
Mónica estaba siendo procesada por los delitos de Secuestro y Posesión de Armas de Uso Exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea en el Juzgado Primero de Distrito en la Laguna, Torreón. Ella se encontraba recluida en el Centro Femenil de Readaptación Social de Coatlán del Río (CEFERESO 16), Morelos.
--Retención ilegal, tortura y violencia sexual y ejecución arbitraria
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos documentó el caso desde los primeros días en que sucedió y el 13 de abril de 2016 emitió la Recomendación 15/2016 en la que reconoce la existencia de retención ilegal, tortura y violencia sexual y ejecución arbitraria en contra de las víctimas; los puntos recomendatorios no han sido cabalmente cumplidos.
El caso de Mónica está documentado en el informe "Sobrevivir a la muerte, tortura de mujeres por policías y fuerzas armadas en México", publicado en 2016 por Amnistía Internacional, y en el informe “Mujeres con la frente en alto, informe sobre la tortura sexual en México y la respuesta del estado”, publicado en 2018 por el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez.
El día 12 de marzo de 2020, el juez federal Yuri Alí Ronquillo Vélez reconoció la inocencia de Mónica Esparza y ordenó su libertad.
Sin embargo, la FGR presentó un recurso de apelación alegando que las pruebas obtenidas bajo tortura son válidas bajo "ciertas excepciones".
El 26 de enero de 2021, el Primer Tribunal Unitario de Coahuila confirmó la sentencia absolutoria, reiterando el rechazo total a las pruebas derivadas de las graves violaciones a los derechos de Mónica.
La sentencia que absolvió a Mónica quedó firme el 12 de marzo de 2021.