Con una sonrisa en el rostro, López Obrador observaba en la pantalla al entonces candidato del PRD al Gobierno del Distrito Federal.
Este viernes, en su conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador revivió el debate que sostuvo hace 20 años con Diego Fernández de Cevallos "El Jefe Diego", tras las críticas hechas recientemente por el panista a su administración y por considerar que el Ejecutivo comete un acto de corrupción todos los días.
-"Eso sí calienta", dijo el presidente López Obrador, dirigiéndose a Jesús Ramírez Cuevas, vocero de Presidencia, a quien pidió transmitir el histórico debate que se transmitió en el 2000 en Televisa.
Con el tiempo encima porque debía trasladarse al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México para tomar un vuelo comercial hacia Cancún, Quintana Roo, López Obrdor pidió que se difundiera en la pantalla del salón Tesorería el debate con "El Jefe Diego".
"Vamos a compartirlo, porque ese debate es actual, creo que fue, sí hace 20 años, en el 2000 iba yo para jefe de Gobierno. Además él y yo estábamos más jóvenes. Le pedimos permiso, porque todo esto tiene que ver con el civismo, a Televisa porque vamos a usar su programa porque ahí fue", expresó el presidente López Obrador.
En la transmisión del debate moderado en ese entonces por Joaquín López-Dóriga, desde el Salón Tesorería, el Presidente observó a un joven Andrés Manuel López Obrador canoso, hablando de corrido, refutando y lanzando misiles "por haber pedido la quema de las boletas electorales" –de la elección presidencial de 1988.
Asimismo, se observó a un Fernández de Cevallos, con su tradicional barba, pero sin el puro que lo caracteriza.
Con una sonrisa en el rostro, López Obrador observaba en la pantalla al entonces candidato del PRD al Gobierno del Distrito Federal.
"Me tengo que ir, si no me va a dejar el avión, ¿está bien no? No se termina la mañanera hasta que termine el debate, aunque yo no esté aquí. Nos vemos", dijo al
retirarse de la mañanera.
Sin la presencia del presidente López Obrador, siguió la conferencia, pero con un Andrés Manuel López Obrador del pasado, aguerrido y arremetiendo contra sus opositores.