La situación en la antigua colonia española es de alta tensión
Argel,- La policía marroquí liberó hoy a familiares del activista saharaui Mohamed Lamine Haddi tras ser detenidos durante varias horas después de difundir un vídeo en las redes sociales en el que acusan a las autoridades penitenciarias de prohibirles el régimen de visitas, informó hoy a Efe la organización "Equipe Media".
Según esta fuente, la madre y sus dos hijos se desplazaron este lunes al centro penitenciario de la ciudad de Tiflet, situado al este de Rabat y a 1.200 kilómetros de distancia de su domicilio, al no tener noticias suyas desde hacía al menos diez días. Tras un primer rechazo, la familia regresó hoy para intentar entrar de nuevo cuando fueron arrestados por las fuerzas de seguridad, que borraron el contenido de sus teléfonos antes de su liberación.
"Si todavía sigue vivo deberían permitirnos visitarle y si está muerto deberían darnos sus restos. No me moveré hasta que vea a mi hijo", aseguró la madre del detenido en un vídeo difundido el pasado lunes en la cuenta Twitter de "Equipe Media", galardonado en España por su defensa de los derechos humanos.
Tras diez años de reclusión cumplidos de un total de 25- tres de ellos en aislamiento-, Haddi comenzó una huelga de hambre el pasado 13 de enero para exigir su traslado a un prisión cercana a El Aaiún, capital del Sáhara Occidental, donde reside su familia.
Haddi, de 42 años, fue condenado junto a otras 23 personas en un macrojuicio por las protestas de 2010 que tuvieron lugar en la zona desértica de Gdeim Izik (a 30 kilómetros de El Aaiún) para reclamar mejoras sociales y que derivó en actos violentos tras la intervención de las autoridades marroquíes para desmantelar el campamento improvisado.
La situación en la antigua colonia española es de alta tensión desde que el 13 de octubre fuerzas armadas marroquíes penetraran en el paso de Guerguerat, zona fronteriza que separa Mauritania de los territorios que el Ejército marroquí ocupa desde 1975, para desalojar a un nutrido grupo de saharauis que habían acampado con el fin de interrumpir un tránsito de mercancías que el Frente Polisario denuncia como ilegal.
Apenas 24 horas después de la ofensiva, el secretario general del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), reconocida por decenas de países -en su mayoría africanos-, Brahim Ghali, aseguró que suponía una violación del alto el fuego y consideró rota la tregua firmada en 1991.
A las tensa situación se añadió el reconocimiento por parte de la Administración del expresidente de Estados Unidos Donald Trump del Sáhara Occidental como parte de Marruecos.