Industria automotriz advierte peligro en inversiones y posible desempleo
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (Anpact), la Industria Nacional de Autopartes (INA) y la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) le enviaron una carta al presidente Andrés Manuel López Obrador, en la que piden garantizar el abasto de energía eléctrica y gas industrial, sin reducción en el suministro o consumo.
Las asociaciones que representan a la industria automotriz expusieron que el suministro de energía eléctrica y de gas natural es indispensable para seguir trabajando en la fortaleza de la economía del país.
El pasado 13 de febrero, el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) declaró estado operativo de alerta en el Sistema Interconectado Nacional, dando como resultado la inhabilitación de las principales centrales eléctricas generadoras del norte y noreste del país por la indisponibilidad de gas natural.
Como resultado de la falta de electricidad, se quedaron sin posibilidad de operar “un sin número de plantas” instaladas en distintas localidades de los estados del norte, noreste, bajío y centro del país.
“Vemos con gran preocupación la falta de electricidad y la inminente escasez de gas para uso industrial, más los estragos que ha dejado la pandemia derivada por el SARS-CoV-2 y una incertidumbre en el futuro del sector energético mexicano, para cuidar y mantener las inversiones realizadas, así como poner en peligro los millones de empleos de nuestras familias mexicanas que dependemos del sector manufacturero más importante”, indica la carta.
Los fabricantes de vehículos, autopartes y distribuidores destacaron que el sector automotriz mexicano genera 18.2 % del PIB manufacturero, con una balanza comercial positiva superior a los 77 mil millones de dólares, “más que el sector petrolífero, los ingresos por remesas y la balanza turística, juntos”.
Lo que se ve reflejado en más de 2 millones de empleos directos.
México es el quinto productor mundial de autopartes y el sexto productor de vehículos ligeros y pesados. Así como el primer exportador de tractocamiones en el mundo.