Antes de partir, Tebboune habló por teléfono con el presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, a quien agradeció la atención médica recibida
Argel,- El presidente argelino, Abdelmejid Tebboune, regresó al país más de un mes después de viajar a Alemania para tratarse de las secuelas que le causó en un pie la infección por covid-19 contraída en octubre, informó hoy la presidencia.
En un comunicado difundido a los medios, la fuente explicó que el mandatario aterrizó el aeropuerto militar de Boufarik, en la ciudad de Blida, donde fue recibido por el presidente interino del Consejo Nacional, Salah Goudjil; el presidente del Parlamento, Slimane Chenine; el presidente del Consejo Constitucional, Kamel Fenniche; el primer ministro, Abdelaziz Djerad, y el jefe de Estado Mayor del Ejército, Said Chanegriha
Antes de partir, Tebboune habló por teléfono con el presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, a quien agradeció la atención médica recibida.
El presidente alemán extendió, por su parte, una invitación al mandatario argelino para que regrese a Alemania en visita oficial una vez se supere la pandemia, agregó la nota.
Tebboune, de 75 años, fue puesto en aislamiento a finales de octubre después de que un miembro de sus séquito diera positivo por coranavirus en un análisis rutinario.
CUATRO MESES DE HERMETISMO
Dos días después fue ingresado de urgencia en un hospital militar de Argelia, donde permaneció 24 horas antes de ser trasladado a Alemania en medio del mismo hermetismo que envolvió la enfermedad de su predecesor, Abdelaziz Bouteflika, obligado a renunciar en abril de 2019.
Tebboune, ex primer ministro en tiempos de Bouteflika y miembros del aparato del régimen, regresó al país a finales de diciembre en una breve visita durante la que firmó los presupuestos generales del Estado para 2021, un trámite obligatorio, antes de regresar a Alemania para seguir el tratamiento contra la covid-19.
Unos días antes, coincidiendo con el aniversario de su elección -lograda en unos comicios con la mayor tasa de abstención de la historia de Argelia, superior al 60 por ciento-, había aparecido en la televisión, visiblemente delgado, para aventar los rumores que corrían por el país sobre su verdadero estado de salud y las similitudes con la enfermedad de Bouteflika.
Su predecesor sufrió en 2013 un grave accidente cardiovascular que deterioró su capacidad pero que no impidió que ganara las elecciones en 2014 y gobernara el país seis años más pese a no volver a dar un discurso, eludir los viajes al exterior y reducir al mínimo sus actos públicos.