El amor de los mexicanos por el chocolate se remonta a la época prehispánica.
En aquellos tiempos, los olmecas descubrieron el cacao y lo usaron en la preparación de una bebida conocida como "xocolatl", hecha con chiles, especias y hierbas. Por su potente sabor y sus propiedades energéticas, a esta preparación se le consideró como un "alimento de los dioses".
Con el paso de los siglos, nuestro gusto por el chocolate no ha desaparecido e incluso se ha diversificado en numerosas presentaciones, como el chocolate con leche, el chocolate relleno, el chocolate en polvo, el chocolate blanco y el chocolate amargo.
Esta última variedad es la que contiene mayor contenido de cacao, por lo cual se potencializan sus efectos favorables para la salud. Si quieres comprobarlo, aquí te decimos qué beneficios aporta el chocolate amargo a tu organismo.
De acuerdo con un estudio de Archives of Biochemistry and Biophysics, los compuestos del chocolate amargo incentivan la producción de óxido nítrico en los vasos sanguíneos. Como consecuencia, las arterias se relajan, facilitan el flujo de sangre y disminuye la presión arterial.
Además, el consumo de chocolate está vinculado con una menor acumulación de placa en las arterias, concluyó un artículo de Clinical Nutrition.
Según el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, dicha placa se conforma por grasas, colesterol, calcio y otras sustancias presentes en el torrente sanguíneo.
Cuando la placa se pega a las paredes de las arterias, se endurece y tapa el paso de la sangre rica en oxígeno al resto de los órganos. Este estrechamiento de los vasos sanguíneos aumenta el riesgo de ataque cardiaco, accidentes cerebrovasculares y enfermedad coronaria.
Ante este peligro para la salud, Clinical Nutrition sugiere el consumo de chocolate amargo dos o más veces a la semana, ya que reduce la incidencia de este tipo de problemas cardiacos hasta en un 57 por ciento.
Como si sus efectos vasodilatadores no fueran suficientes, el chocolate amargo también regula los niveles de colesterol en la sangre, demostró una investigación de "The Journal of Nutrition". Los resultados demostraron que el cacao contenido en este alimento previene la oxidación del colesterol LDL (malo).
El blog especializado en salud Healthline explica que el colesterol LDL oxidado contribuye a la acumulación de placa, inflama las paredes arteriales y aumenta el riesgo de padecimientos cardiacos.
La capacidad antioxidante del chocolate amargo evita estas complicaciones y, en cambio, aumenta las cantidades de colesterol HDL (bueno) en el torrente sanguíneo. Según la Asociación Estadounidense del Corazón, esta sustancia remueve el colesterol "malo" almacenado en las arterias y lo regresa al hígado, donde se procesa y se elimina el excedente.
Una publicación de "The Journal of Nutrition" determinó que el chocolate amargo disminuye la resistencia a la insulina, un factor ligado a la diabetes tipo 2 y a los problemas cardiovasculares.
La insulina es una hormona producida por el páncreas, encargada de ayudarle a la glucosa para que ingrese a las células y se utilice como fuente de energía, indica la Federación Española de Diabetes (FEDE). A través de este mecanismo natural, los niveles de azúcar en la sangre se mantienen estables.
Sin embargo, la resistencia a la insulina hace que las células ya no respondan adecuadamente a esta hormona y la glucosa se quede en el torrente sanguíneo. Esto eleva los niveles de azúcar en el cuerpo e incrementa el riesgo de padecer diabetes tipo 2, aseguran los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos.
El cacao del chocolate amargo tiene un efecto sensibilizante en las células e incrementa la secreción de insulina en el páncreas, por lo que facilita la absorción correcta de glucosa, asegura la revista científica Antioxidants & Redox Signaling.
Un estudio de "The Journal of Nutrition" demostró que los antioxidantes del cacao, presentes en el chocolate amargo, protegen tu piel contra los rayos UV del sol, mejoran el flujo sanguíneo en el tejido cutáneo, aumentan su grosor y le dan una apariencia hidratada.
La Sociedad Americana contra el Cáncer afirma que la radiación UV es una de las principales causas de cáncer de piel. Por esta razón, el efecto protector del chocolate amargo es de suma importancia para evitarlo.
De igual manera, el consumo de chocolate reduce la aspereza y la descamación de la piel. Además, le aporta densidad para que se vea firme y sin signos de envejecimiento prematuro.
La revista médica "Hypertension" encontró que el cacao del chocolate amargo favorece las funciones cognitivas en adultos mayores con deterioro mental. También mejora la fluidez verbal, estimula la memoria a largo plazo y previene enfermedades degenerativas como el Alzheimer y el Parkinson, de acuerdo con Antioxidants & Redox Signaling.
Por su parte, la Escuela de Medicina de la Universidad John Hopkins agrega que el chocolate amargo favorece la percepción visual-espacial, el tiempo de respuesta a los estímulos externos y disminuye el estrés.
Escoge barras de chocolate con un mínimo de 70 por ciento de cacao para sacarle el máximo provecho a sus beneficios, recomienda la Escuela de Salud Pública de Harvard.
Considera que 100 gramos de chocolate amargo contienen hasta 598 calorías, así como 42.6 gramos de grasa, según datos del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. No comas más de 56 gramos al día, de lo contrario podría provocarte sobrepeso u obesidad.