El año pasado el cárnico que ocupó el primer lugar de consumo aparente fue el pollo, con 4 millones 408 mil toneladas.
El pollo y el huevo se convirtieron en los favoritos de 2020, pues ante la caída de ingresos que provocó la pandemia por Covid-19, se debilitó el consumo de proteínas de precio elevado y subió la demanda de las más accesibles, según el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA). El director General de GCMA, Juan Carlos Anaya, expuso que esos productos son considerados "las proteínas más democráticas", pues se consumen en todos los niveles económicos.
El año pasado el cárnico que ocupó el primer lugar de consumo aparente fue el pollo, con 4 millones 408 mil toneladas, y le siguió el puerco, con 2 millones 468 mil toneladas. En tanto, la carne de bovino tuvo el tercer lugar, con un millón 945 mil toneladas métricas. Contra esas proteínas cárnicas también compitieron el huevo y la leche, pues el primero registró un aumento en su consumo, al llegar a 3 millones 77 mil toneladas, mientras que la segunda tuvo una reducción para quedar en 15 millones 761 mil litros, de acuerdo con el balance estadístico nacional pecuario.
"Ante esta caída de los ingresos de las familias mexicanas, las amas de casa prefieren ir racionalizando, y lo más barato son el pollo y el huevo. Uno quisiera carne de res, pero es más cara", expuso Anaya Castellanos. Comentó que usualmente es un comportamiento que se presenta en las crisis, y ante la actual, que fue generada por el Covid, se observa que en los deciles medios y bajos la gente prefiere consumir pollo y huevo. En tanto, la carne de res se consume en mayor proporción en los deciles más altos, mientras que el cerdo en los deciles bajos y medios.
Si se compara 2019 contra el año pasado, el consumo aparente de pollo no sólo se mantuvo, sino que aumentó 1.8%: de 4 millones 329 mil a 4 millones 408 mil toneladas métricas, además de que bajó 2.9% la importación: de 858 mil a 833 mil toneladas. El consumo del huevo aumentó 2.1% en el mismo lapso, al pasar de 2 millones 977 mil toneladas a 3 millones 77 toneladas, a pesar de que hubo un aumento de precios al productor de 20 a 26 pesos por kilo en su variedad blanca.