Rusia entregó hoy a la embajada de EU una nota de protesta por la difusión "a gran escala" de "noticias falsas" por parte de plataformas digitales estadounidenses y la legación en Moscú sobre las manifestaciones del pasado sábado en favor de la liberación del líder opositor ruso Alexéi Navalni.
"Observamos la propagación a gran escala de noticias falsas sobre Rusia por parte de plataformas digitales estadounidenses, que replican sistemáticamente contenidos provocativos, distribuidos de manera coordinada, a su vez, por la embajada de Estados Unidos en Moscú", señala el Ministerio de Exteriores ruso en un comunicado.
La diplomacia rusa declara que entregó la nota de protesta a la embajada y que "se reserva el derecho a tomar represalias".
Si bien no se refiere específicamente a las protestas del pasado sábado en todo el país en apoyo de Navalni, en las que fueron detenidas más de 3.700 personas; la queja se produce después de que Exteriores ya protestara verbalmente ante el embajador estadounidense, John Sullivan, por el apoyo de EU a las marchas.
Lo que hizo la embajada estadounidense fue publicar en su página web una alerta para sus ciudadanos que incluía el itinerario de las protestas en las principales ciudades de Rusia y denunciar en Twitter que Rusia pretendía "suprimir" con las detenciones "el derecho de todo el mundo a la protesta pacífica y a la libertad de expresión".
La protesta oficial también se produce después de que el regulador ruso de comunicaciones, Roskomnadzor, anunciara que multará a las redes sociales Facebook, Instagram, Twitter, Youtube y TikTok por publicar llamamientos a la participación de menores de edad en las protestas.
También ha amenazado con sanciones a las dos principales redes sociales rusas, VKontakte y Odnoclassniki, aunque tanto las plataformas occidentales como las rusas sí eliminaron la mayoría de mensajes al respecto, tal y como había exigido el regulador antes de las manifestaciones.
Según el Defensor del Menor, unos 300 menores de edad fueron detenidos en todo el país durante las protestas del pasado sábado.
Las autoridades han acusado a Navalni de atraer a menores de edad a sus mítines no autorizados, en muchos casos previa remuneración económica, aunque la oposición lo niega categóricamente.