La canciller alemana, Angela Merkel, afirmó hoy que su objetivo es agotar su última legislatura, de la que aseguró no lamentar nada, gobernando de manera sensata.
"Mi perspectiva es gobernar a ser posible de manera sensata hasta el último día en el que tengo la responsabilidad", dijo Merkel durante una rueda de prensa para analizar la situación epidemiológica en el país.
Aseguró no lamentar el hecho de haber presentado su candidatura a esta cuarta legislatura, que termina en unos meses, aunque en su momento fue una decisión "difícil", reconoció.
"La política consiste, y eso es lo fascinante de ella, en que llegas por la mañana a la oficina y no sabes cómo será la noche, y que comienza un año y no te puedes imaginar qué es lo que ocurrirá en ese año", agregó.
En ese sentido, dijo que en su discurso de Año Nuevo de 2015 no se podía imaginar el desafío que iba a suponer la cuestión de la migración, ni tampoco en el de 2007, que faltaba poco para caer en una crisis financiera tremenda; "y ahora, esta pandemia", agregó.
"La política significa manejar lo que trae consigo la realidad de la mejor manera en beneficio del pueblo alemán, ese es el juramento que prestamos", subrayó.
Según la canciller, esto es a veces "agotador", pero es también "donde radica el encanto", el que haya que reaccionar de manera flexible y adaptarse a las situaciones.
Lo "más importante quizás" en política no es recostarse en el camino encontrado alguna vez, sino analizar "con inteligencia" una y otra vez la situación y preguntase si hay algo que cambiar.
"Esa es la tarea y eso es lo que me gusta, no lamento nada", agregó
Reconoció que esta tarea es "exigente" y que cree haber cumplido con ella hasta este momento.
Para la canciller, "cada día de gobierno debe ser tomado con la misma seriedad y siempre con la misma mirada despierta".
Que hoy sea su último 21 de enero como canciller, es indiferente.
"La sensación es de tensa atención, y eso no se diferencia en nada del quinto día de ejercicio de mi cargo", afirmó.