Una reciente investigación de la cadena de televisión libanesa Al Jadeed ha revelado posibles vínculos entre tres hombres de negocios sirios y el cargamento de nitrato de amonio que explotó en Beirut el pasado 4 de agosto tras más de seis años almacenado sin custodiar en el puerto de la ciudad.
Poco después de la deflagración que causó más de 200 muertos, 6,500 heridos y una fuerte devastación en la capital libanesa, las autoridades georgianas confirmaron a Efe que el fertilizante fue producido en su territorio, de donde partió en 2013 rumbo a Mozambique a bordo del carguero 'Rhosus', con bandera moldava.
"Inicié esta búsqueda al sospechar del cargamento y su entrada en el Líbano, ya que para mí estaba claro que el acuerdo había sido alcanzado por una compañía mediadora llamada Savaro y no directamente entre las empresas en Mozambique y Georgia", explicó a Efe el periodista autor de la investigación, Firas Hatoum.
Hatoum mantiene que la "sociedad ficticia" Savaro -sin sede conocida y con vínculos con Chipre y las Islas Vírgenes, según datos del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación- actuó como intermediaria entre la exrepública soviética y el país africano para la transacción del nitrato de amonio. Según el relato del periodista, los documentos del trato a los que pudo acceder, confirman el papel de dicha sociedad en el entramado.