Italia registró 17,533 nuevos contagios por coronavirus y 620 muertos las últimas 24 horas, unas cifras en la línea de los últimos días aunque con más fallecidos, según los datos del Ministerio de Sanidad.
Con estos datos, los casos totales desde el inicio de la emergencia sanitaria en febrero son ya 2,237,890, y los muertos son 77,911.
En esta jornada se han realizado 140,267 pruebas de detección y la tasa de positividad ha descendido al 12.5 %, frente al más del 14 % de este jueves.
Los pacientes ingresados en unidades de cuidados intensivos son 2,587, una cifra invariable desde el jueves pues entraron 187 nuevos enfermos, los mismos que salieron.
Y siguen aumentando los hospitalizados en otros repartos hospitalarios, que ya son 23,313 en todo el país.
La región de Véneto, en el norte, encabeza hoy el crecimiento de casos con casi 3,400 nuevos contagios, seguida de Emilia-Romagna y Lombardía.
El Gobierno italiano ha decidido que desde el próximo 10 de enero y hasta el 15 de enero las regiones septentrionales de Emilia-Romaña, Lombardía y Véneto, y las meridionales de Calabria y Sicilia tendrán un confinamiento perimetral tras el aumento de la curva de contagios de coronavirus.
En estas cinco regiones no se podrá salir de la región ni del propio municipio, salvo por comprobadas razones de trabajo, salud o necesidad.
Además, los restaurantes, bares, pastelerías y heladerías estarán abiertos solo para la compra de comida.
El resto del país permanecerá en "zona amarilla", la de menor riesgo de los tres niveles que ha establecido el Gobierno, y en toda Italia se mantendrá el toque de queda entre las 22:00 horas y hasta las 5:00 de la madrugada del día siguiente.