Cuando Solari se ponía hablar con los jugadores de los Potros, "nos contaba alguna anécdota, pero no para presumir".
Cuando Santiago Solari llegó al futbol mexicano para jugar con el Atlante, en el 2009 todos lo veíamos "como alguien inalcanzable… Había jugado en el Real Madrid, con los mejores del mundo… Pero la verdad es que aquí se comportó como uno más".
Quien habla de esta forma del "Indiecito", el nuevo técnico del América, es Guillermo Rojas, "Rojitas", quien compartió vestidor, concentraciones y algunas charlas de comedor.
En verdad, recuerda "Rojitas", "lo veíamos como algo de otro planeta, y él llegó comportándose de forma humilde, sí, era muy serio, casi no hablaba, pero cuando lo hacía siempre te dejaba algo, alguna historia, alguna anécdota, alguna enseñanza, tanto de vida como en la cancha, la verdad es que creo que América ha hecho una gran contratación, le va a ir muy bien, es un buen futbolista y creo que es un buen técnico".
Cuando Solari se ponía hablar con los jugadores de los Potros, "nos contaba alguna anécdota, pero no para presumir que él había jugado con tal o en tal lado, sino para decirnos que a esto podíamos llegar, para motivarnos, para ayudarnos".
A Memo le quedó muy grabados algunos consejos que le daba a él particularmente. "Hablaba de mejorar mucho la técnica, del control orientado, me decía: 'con tu velocidad, lo que tienes que hacer cada vez que recibas el balón es enfilarte hacia el frente, no asegurar la recepción sino ganar un tiempo', te ayudaba a sacar lo mejor de ti".
Además de todos, era un líder: "Cuando jugamos ese partido con el Barcelona, al terminar el juego nos dijo: 'en verdad no han dimensionado aún lo que acaban de hacer, han dado un gran juego contra el mejor equipo del mundo, quizá el de la historia. Este juego va a quedar para la historia y tu Memo, vas a valorar ese gol'…".
Muchos han catalogado a Solari de que no fue un compañero y que no se entregó como futbolista, sobre todo por los exabruptos que tuvo con José Guadalupe Cruz, el entonces técnico de los Potros… "No fue para tanto", dice Rojas. "Ese juego fue contra el San Luis, era importante, nos jugábamos mucho, y nos dieron la vuelta; el problema vino porque Santiago estaba de ese lado de la línea, corriendo por esa banda, y el Profe pues como era el primero que tenía, lo agarró a él. Vino el cambio, lo peor es que yo entré por él, se dijeron de todo y cuando Santi llegó a la banca pateo Gatorade y demás. La discusión se fue hasta el vestidor, se encerraron, pero no pasó nada… Discusiones como esa las vi en todos los equipos donde estuve".
-¿Cómo sería Solari de técnico?
"Nos decía que la diferencia entre los entrenadores de Sudamérica y Europa, es que allá nunca se falta al respeto, no hay eso de gritos ni insultos, aquí por nuestra sangre latina, pues hay que apretar un poco al jugador, allá no… Quizá tenga que cambiar un poco, quizá no, pero reitero, tiene mucha experiencia, manejar un vestidor como el del Real Madrid, con los mejores jugadores del mundo, no es nada complicado, salió porque tuvo una mala semana y ya… América hizo una gran contratación, seguro".